Estas actuaciones supondrán la ampliación del Salón de Pinos en tres nuevos tramos; el ajardinamiento del talud situado en la glorieta de San Vicente y el entorno de la calle Aniceto Marinas; la construcción de dos pasarelas que unirán los distritos de Usera y Arganzuela, y la reconversión del Puente del Rey para uso exclusivamente peatonal y ciclista.

Según explicó en rueda de prensa el alcalde, Alberto Ruiz- Gallardón, estos seis proyectos, cuyas obras comenzarán en octubre, se suman a las cinco actuaciones del proyecto Madrid Río que ya están en marcha, con un presupuesto de 17,7 millones de euros, de manera que el proyecto cuenta con más de 50 millones de obra en curso.

El tramo del Salón de Pinos que ya existe frente al estadio Vicente Calderón, de 550 metros de longitud y 26 metros de ancho, se ampliará gracias a una inversión de 24,3 millones de euros. Su actual longitud se multiplicará por cuatro hasta alcanzar los 2.091 metros (1.465 metros en dos tramos de la margen derecha y 626 en un tramo de la margen izquierda).

El primero de los nuevos tramos que se ampliará se sitúa en la margen derecha del río y se extiende entre la avenida de Portugal y el Puente Oblicuo, en el distrito de Latina; el segundo supone una continuación del anterior, extendiéndose entre el Puente Oblicuo y la Travesía Iván de Vargas, y el tercero discurre sobre la margen izquierda del río y está situado en el distrito de Arganzuela, entre el Centro de Estudios Hidrográficos y el Puente de San Isidro.

En estos tramos se instalarán, entre otros elementos,puntos de luz (128 en total), bancos de hormigón y madera (179), espacios para juegos infantiles (21) y unidades de elementos de gimnasia para circuito biosaludable (32). Los tres proyectos, que estarán terminados en 10 meses, alcanzan una superficie de 54.255 metros cuadrados, en la que se plantarán también 3.157 árboles.

En cuanto al ajardinamiento del talud de conexión entre la glorieta de San Vicente y la margen izquierda del río, en el entorno de la calle de Aniceto Marinas, cuenta con un presupuesto de 1.919.941 euros y las obras terminarán en cuatro meses. Se instalarán 41 puntos de luz y 155 bancos de granito, y se plantarán 1.142 metros cuadrados de césped, hiedras tapizantes y arbustos y árboles de diferentes especies.

Según Gallardón, este proyecto recupera el talud arbolado y los caminos, permitiendo una mejor conexión con el Puente del Rey, mejorando las comunicaciones a pie y en bicicleta entre ambos lados del río y convirtiendo este espacio en una pieza clave de la conexión natural entre el centro de la ciudad y la Casa de Campo.

Además, se construirán dos pasarelas gemelas que unirán los distritos de Usera y Arganzuela. Una de ellas conecta las calles de San Graciano y de Eugenio Caxes con la zona del Invernadero de Arganzuela, y la otra, situada más al sur, conecta las calles de Eugenio Caxes y de San Zacarías con el entorno del Matadero. El presupuesto es de 5.055.441 euros y estarán finalizadas en 9 meses.

La reconversión del antiguo Puente del Rey para su uso exclusivo peatonal y ciclista supondrá un coste de 2.497.915 euros. Como todos los demás proyectos, las obras comenzarán el próximo octubre y en este caso estarán terminadas en cinco meses. Según el alcalde, esta obra devolverá el Puente del Rey a su estado de 1933 para recuperar su condición de gran acceso peatonal desde el centro de la ciudad a la Casa de Campo y al río Manzanares.