Tamayo dijo a Servimedia que con esta medida se evitarán sucesos como el ocurrido en dependencias de la Guardia Civil de Roquetas de Mar (Almería), donde el detenido J.M.G., de 39 años, falleció como consecuencia de la "brutal" paliza que recibió.

"Cualquier sesión en que la persona detenida esté en contacto con los efectivos debe ser grabada. Estamos ante una buena ocasión para que pongan en consideración la utilización de este tipo de mecanismos", añadió Tamayo.

La responsable de Campañas de AI aseguró que el agente de la Guardia Civil implicado ya tenía antecedentes de malos tratos a detenidos.

RÁPIDA E INMEDIATA

Pese a que Amnistía ha denunciado en numerosas ocasiones que en España hay casos de malos tratos en dependencias policiales, Tamayo resaltó la "rápida e inmediata" respuesta de las autoridades en este caso concreto, pues alejaron de sus funciones al efectivo que acometió la "brutal" paliza y le pusieron a disposición judicial.

"En anteriores oportunidades ha habido corporativismo y no se ha actuado con la debida diligencia", subrayó Tamayo, que instó a las autoridades a dotarse de los mecanismos "más eficaces para no tolerar la tortura y malos tratos como los que se continúan produciendo".

Por último, la responsable de campañas de AI exigió que se garantice el cumplimiento del derecho de la víctima y de sus familiares a la reparación.