"Yo tengo pleno derecho a reunirme con quien quiera, cuando quiera y como quiera, y no oy a caer en la trampa de desvelar mi agenda, porque creo que ese es un deber de confidencialidad hacia las personas que se reunen conmigo".

"No me voy a convertir en una víctima del señor González", agregó Cascos en declaraciones a Onda Cero. "El que tiene que dar explicaciones es el señor González, y su Gobierno, y su partido, que son los que tienen responsabilidades en el origen de los GAL, en el funcionamiento de los GAL, en la financiación de los GAL y en la desaparición de los GAL (...) Si el seor González ha recuperado la memoria en estos últimos días, bueno será que nos la refresque a todos y que nos cuente lo que de verdad sabe de esta historia".

Alvarez Cascos apuntó la posibilidad de que González haya cometido un delito de escuchas ilegales: "¿Qué información tenía desde hace cuatro años el presidente del Gobierno? ¿Cómo obtiene esa información? Yo quiero recordarle que la obtención de grabaciones de conversaciones por medios ilícitos tiene varios tipos penales en relación con el grado e responsabilidad, y si el señor González ha dispuesto de esas grabaciones en la época en la que tenía alguna responsabilidad en la Administración, esa responsabilidad penal se agrava. Por lo tanto, yo estoy encantado de que el señor González y el Partido Socialista pongan rápidamente sobre la mesa todas esas pruebas".

DESCEREBRADOS

Cascos aseguró que él nunca ha dicho que González sea el "cerebro" de los GAL. "Yo he dicho que me colocaba del lado de los descerebrados", indicó, "y que desde luego enningún caso yo me situaría del lado del cerebro del 'caso GAL', porque el cerebro del 'caso GAL' es cómplice en un escándalo que ha costado 28 vidas humanas".

"Por lo tanto, si hay que dividir en el 'caso GAL' a los que tienen alguna opinión sobre el mismo entre descerebrados o cerebro, yo prefiero estar del lado de los descerebrados y no del lado del cerebro", agregó.

Respecto a si se refería a Felipe González cuando hablaba del "cerebro" de los GAL, afirmó que él nunca lo ha dicho: "Lo que yo pense en el pensamiento más íntimo, me lo reservo. Lo que puedo decir desde el punto de vista de las responsabilidades políticas es lo que he dicho".

Sin embargo, el vicepresidente primero del Gobierno reiteró que Felipe González tiene "la máxima responsabilidad política" en el 'caso GAL'.

AMEDO

Respecto a la supuesta entrevista que mantuvo con el abogado de Amedo y Domínguez, Jorge Manrique, en el despacho del director del diario "El Mundo", Alvarez Cascos ni confirmó ni desmintió el encuentro."Yo no tengo que dar ninguna explicación de mi actividad normal, ni en mi etapa de oposición ni en mi etapa de gobierno. Mientras yo tenga una conducta normal y no sea sospechoso de estar cometiendo ningún tipo de acto reprobable, no tengo que dar ninguna explicación".

"El que tiene que dar explicaciones es él", continuó. "El señor González no está para pedir explicaciones a los demás, no está para amenazar a los demás diciendo que tiene información. Por cierto, tendrá que explicar como la obtiene (..) La información que sobre mí pueda tener a mí no me preocupa lo más mínimo, y cuanto antes diga toda la información que tiene en relación conmigo, antes saldremos ganando".

A juicio de Francisco Alvarez Cascos, si es cierto que el líder socialista tiene información de interés, "no estaría mal que esa información la contara en el Parlamento (...) Si el señor González ha recuperado ahora la memoria y ahora sabe tanto de los demás -lo que no sabía de sus propios compañeros-, bueno será que el señor Gonzlez sea el primer compareciente en una comisión de investigación (sobre los GAL) en el Congreso".

El vicepresidente aseguró que lo que él no va a hacer es convertirse voluntariamente "en objeto de sospecha, para hacer el juego a la trampa que el señor González trata de tendernos a las personas que denunciamos este asunto y que luchamos por el esclarecimiento completo de la verdad en el 'caso GAL', como si el 'caso GAL' al final fuera un escándalo, fuera una operación, fuera un montaje que ha costado 2 vidas humanas organizado por la oposición, organizado por la Audiencia Nacional y organizado por algunos periódicos".

Durante la entrevista, el 'número dos' del PP y del Gobierno no quiso responder en ningún momento a la pregunta de si se reunió con el abogado de Amedo y Domínguez, alegando que "las personas normales, y de manera especial los que tuvimos responsabilidades como diputados en la oposición, tenemos el deberde trabajar en cumplimiento de nuestras obligaciones, y en cumplimiento de nuestas obligaciones tenemos el derecho de hablar con quien queramos". "Yo no tengo ninguna obligación de dar cuenta de las llamadas que he recibido o de las conversaciones que he tenido".

"Si yo he hablado con tal o cual abogado, en función de su responsabilidad profesional, no tengo ninguna obligación de dar cuenta de unas conversaciones que no tienen ningún ribete de duda", concluyó al respecto.

Por otro lado, negó que prometiese beneficios penitenciarios a los ex policías Amedo y Domínguez si implcaban a Felipe González en el 'caso GAL, como denunció éste. "Jamás desde el Partido Popular utilizaremos beneficios penitenciarios o medidas de gracia para ocultar la verdad, para comprar silencios, que es justamente lo que el señor González y sus gobiernos han venido haciendo, pagando sueldos desde los años 89 al 94 al señor Amedo y al señor Domínguez, como ellos mismos han relatado, depositando en cuentas en Suiza a nombre de cada uno cien millones de pesetas, que están ya localizadas y controloadas porel juez, siendo recibidos por un fiscal general del Estado que les ha ofrecido en nombre del 'número uno' determinados beneficios penitenciarios, a los que se apuntó también el señor González, que finalmente concedió el señor Belloch y de los que tuvo que dar cuenta en el Parlamento. Esa es la verdad, eso es lo que se ha hecho y de eso es de lo que hay que dar explicaciones, y de eso es de lo que hay que asumir responsabilidades".

AMENAZAS A ASENSIO

Por otro lado, negó tajantemente que el Gobierno aenazara al presidente de Antena 3, Antonio Asensio, por llegar a un acuerdo con Prisa respecto a la televisión digital. "Eso forma parte de una campaña que fundamentalmente están desarrollando el Grupo Prisa y el Grupo Zeta para tratar de endosarle al Gobierno unos supuestos ataques a las libertades, y fundamentalmente a la libertad de prensa", afirmó.

"Este es un buen ejemplo de cómo se utiliza la información como propaganda para sentirse amenazado y poder formar parte como protagonista en primera líea de la campaña de descrédito del Gobierno diciendo que socava las libertades, y otras veces diciendo que se atenta contra la libertad de empresa, cuando este Gobierno lo que está es firmemente comprometido con la libertad de empresa, entre otros aspectos con la defensa de la competencia", concluyó Alvarez Cascos, que acusó a Asensio de mentir.