Alonso se expresó así al término de la ronda de contactos que el PSOE ha mantenido esta semana con todos los partidos políticos para sondear los apoyos con los que cuenta Zapatero ante el debate de investidura de la semana que viene.

Nada más terminar la entrevista con el Partido Popular, Alonso inicialmente se mostró indiferente al momento en el que el Congreso aprobará el nombramiento de Zapatero como presidente. "Si es en primera vuelta, bien; y si es en segunda, también", remachó.

Sin embargo, a continuación adujo que su deseo es "gobernar sin condicionantes", por lo que no le importa que los partidos nacionalistas se abstengan en la primera votación, ya que los 169 diputados del PSOE pueden ser suficientes para que Zapatero sea investido por mayoría simple a la segunda.

Asimismo, Alonso manifestó su intención de fomentar el "diálogo" y de "buscar acuerdos" con todos los partidos políticos esta legislatura, especialmente para conseguir un pacto en la lucha contra el terrorismo y para renovar el Consejo General del Poder Judicial.

El portavoz socialista diluyó en su intervención la propuesta del PP para que la negociación sobre el Poder Judicial se aproveche para acordar otra serie de reformas legislativas que permitan mejorar el sistema de tribunales.

En opinión de Alonso, esos cambios que quiere llevar a cabo la formación de Mariano Rajoy no serviría de nada si primero no se renueva el CGPJ, ya que "es el órgano de gobierno de los jueces y ellos son los sujetos encargados" de poner en marcha las reformas que pide el PP.

Con el fin de poner en marcha la renovación del Poder Judicial, Alonso confirmó que "nada más producirse" la investidura de Zapatero como presidente del Gobierno se pondrá en contacto con su homóloga popular, Soraya Sáenz de Santamaría, para iniciar las conversaciones.

Finalmente, destacó que en la reunión de hoy con la portavoz del PP también le ha ofrecido un pacto para negociar los ejes básicos de la Presidencia de la Unión Europea, que recaerá sobre España en el año 2010.