Estos jóvenes, parte de un total de 50 que cumplen sus penas de prisió en Navarra en segundo grado, tras realizar los llamados "plantes" al tercer grado penitenciario, fueron llevados a primeras horas de ayer a las cárceles de Ocaña, Daroca, Teruel, Madrid, Soria, Ciudad Real, Alcalá y Teruel. Instituciones Penitenciarias justificó la orden por motivos reglamentarios, mientras los colectivos antimilitaristas aseguraron que se trataba de traslados "ilegales, sancionadores y arbitrarios".

En la prisión pamplonea hay, además, otro centenar de presos por negarse a realizar l servicio militar o la PSS que disfrutan del tercer grado.

La dirección del centro penitenciario navarro ha indicado, según un abogado del Movimiento de Objección de Conciencia, que los traslados se derivan de la situación de desórdenes y protestas que ha protagonizado el colectivo de insumisos encarcelados. Frente a estas manifestaciones, los grupos antimilitaristas indicaron que no se trata de una medida necesaria sino de un castigo "para que los presos adopten posturas pasivas".

En la misiva ue Alli ha remitido a Belloch, el primero afirma ser "absolutamente favorable" a que los reclusos navarros cumplan sus condenas en Pamplona y, aunque reconoce que la Comunidad Foral carece de competencias en estas materias, destaca que su deseo "se acentúa particularmente por lo que se refiere a los jóvenes insumisos, habida cuenta de las especialísimas circunstancias legales y sociales derivadas de la tipificación de dicho delito".

El presidente navarro, quien califica esta situación de "desagradable, afirma que la misma no es de recibo y anuncia al ministro de Justicia que ha dado instrucciones a su consejero de Bienestrar Social para que realice "las gestiones oportunas tendentes a remediar la situación". Por último, Alli reclama que no se lleven a efecto estos traslados y que los mismos no vuelvan a producirse.

Por otro lado, el presidente del Parlamento foral, el socialista Javier Otano, ha recibido hoy a una reprentación de padres de los jóvenes trasladados, quienes le hicieron llegar su precupación y angustia, a la par que señalaron que "no es justo que unos pacifistas, que por no empuñar las armas han preferido estar en prisión, acaben de esta forma".

Tras el encuentro, Otano destacó que es difícil hacer una valoración de lo ocurrido cuando hay dos versiones, la de la dirección de la cárcel y la de los padres. "Mi voluntad es que estén en Pamplona, pero he de conocer también las razones de Instituciones Penitenciarias. El próximo lunes hablaré con este organismo y con el Ministerio de usticia para que, en el peor de los casos si no hay un solución rápida, estos jóvenes sean reunidos en una sóla cárcel lo más cerca posible de Pamplona".

Asimismo, el Pleno del Ayuntamiento de la capital navarra aprobó hoy una moción en la que, además de invitar a los insumisos a que no quebranten el tercer grado penitenciario, solicita al Ministerio de Justicia su regreso a Pamplona.

Mientras IU ha pedido ya una entrevista con Juan Alberto Belloch para tratar el tema, EA ha anunciado que realizaá una interpelación en el Senado sobre el tema. Asimismo, varios partidos parlamentarios navarros han demandado una reunión de la comisión de Derechos Humanos del Legislativo foral que, posiblemente, se celebre la próxima semana. Los colectivos antimilitaristas remitieron, además, un escrito al Defensor del Pueblo para que medie en el conflicto.