Ciencia

Algunos dinosaurios movían la cola a más de 100 km/h

- No a una velocidad supersónica, como sugería un estudio anterior

MADRID
SERVIMEDIA

Los diplodócidos -grandes dinosaurios herbívoros con largos cuellos y colas- pudieron ser capaces de mover estas como látigos a velocidades de hasta 33 metros por segundo, es decir, más de 100 km/h.

Así se sugiere en un estudio publicado este jueves en la revista ‘Scientific Reports’. Esto contradice el hallazgo de una investigación anterior, que proponía que una estructura hipotética unida al final de la cola de un diplodócido -similar a un mechón al final de un látigo- podría moverse más rápido que la velocidad del sonido (340 metros por segundo) y crear un pequeño estampido supersónico.

Simone Conti, del Politécnico de Milán (Italia), y sus colegas simularon los movimientos de la cola de los diplodócidos utilizando un modelo basado en cinco especímenes de diplodócidos fosilizados.

La cola del modelo mide más de 12 metros de largo, pesa 1.446 kilos y consta de 82 cilindros, que representan vértebras, unidos a una base inamovible del hueso de la cadera.

Cuando la base de la cola se mueve en un arco, genera un movimiento similar al de un látigo con una velocidad máxima de 33 metros por segundo, más de 10 veces más lento que la velocidad del sonido en el aire estándar y demasiado lento para crear un estampido supersónico.

Los autores probaron si la cola de su modelo sería capaz de resistir el estrés de moverse lo suficientemente rápido como para crear un estampido supersónico. Descubrieron que la delgada cola en forma de látigo no podía moverse a una velocidad máxima de 340 metros por segundo sin romperse.

TRES ESTRUCTURAS HIPOTÉTICAS

Luego, los autores evaluaron si agregar tres estructuras hipotéticas diferentes de un metro de largo, que imitan el extremo de un látigo, al final de la cola del modelo podría permitirle viajar a la velocidad del sonido sin romperse.

La primera estructura constaba de tres segmentos hechos de piel y queratina, la segunda consistía en filamentos de queratina trenzados y la tercera tenía una estructura similar a un mayal compuesto de tejidos blandos. Ninguna de ellas pudo resistir el esfuerzo de moverse a 340 metros por segundo sin que se rompiera la cola.

Ello sugiere que las colas de los diplodócidos pueden no haber sido capaces de moverse lo suficientemente rápido como para crear un pequeño estampido supersónico.

Sin embargo, los autores especulan que es posible que los diplodocus y otros dinosaurios similares pudieran mover la cola lo suficientemente rápido como para usarlas como armas defensivas o combatir con otros diplodócidos.

(SERVIMEDIA)
08 Dic 2022
MGR/clc