Guerra criticó duramente en los pasillos del Congreso la actitud mostrada en as últimas semanas por el Gobierno y ejemplificada, en su opinión, en el comportamiento del ministro del Interior, Mariano Rajoy, en la última sesión de control.

Pese a que el origen de su poder es democrático, a través de las urnas, Guerra sentenció que el ejercicio que el Ejecutivo hace de ese poder "no es democrático, es totalitario".

"Su papel fundamental en el Parlamento es ser controlado por la oposición, pero ha pasado a ejercer un control sobre la oposición incluso exagerándolo, de acusacón permanente de la oposición, y Rajoy no está para eso. Es una consigna estudiada y ordenada por el presidente del Gobierno", aseguró.

En su opinión, el Gobierno "está degradando muy seriamente la democracia. Estas cosas en principio no se notan, pero cuando se hace irreversible se acuerda uno de los errores que cometió. Lo van a pagar, pero lo dramático es que lo vamos a pagar todos los españoles. Vamos a anhelar el momento en que el diálogo era posible entre los demócratas".