Así lo declaró tras inaugurar unas jornadas sobre la cumbre de la OTAN que se celebrará en Madrid los días 29 y 30 de junio. El titular de Exteriores respondió al anuncio de la banca de Argelia de congelar sus servicios desde y hacia España, poco después de que la presidencia de Argelia que ostenta Abdelmadjid Tebboune comunicase la suspensión "inmediata" del Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperación que firmó el 8 de octubre de 2002 con España.

Albares subrayó que ayer expresó, “como he expresado en muchas ocasiones a lo largo de las últimas semanas, nuestro deseo, el deseo del Gobierno de España, mi deseo personal como ministro de Asuntos Exteriores”, de tener “las mejores relaciones con Argelia, con el gobierno de Argelia, con el pueblo de Argelia”.

Las decisiones argelinas se produjeron poco después de la comparecencia del presidente del Gobierno ante el Pleno del Congreso de los Diputados, para informar del Consejo Europeo extraordinario de los días 30 y 31 de mayo de 2022, y sobre todo de la nueva postura de España sobre el Sáhara Occidental, para recuperar la relación con Marruecos.

Esa posición, que considera la propuesta de una autonomía dentro de Marruecos como la más realista, supone para Argelia “una violación de las obligaciones legales, morales y políticas (de España) como potencia administradora del territorio” del Sahara Occidental.

SERENIDAD Y FIRMEZA

El responsable de la Diplomacia subrayó su respaldo “a todo el contenido y todos los principios que se recogen en el Tratado de Amistad” entre España y Argelia, y citó “la igualdad soberana de los Estados, la no injerencia en los asuntos internos, el respeto mutuo, el beneficio mutuo para nuestros dos pueblos”. Y añadió que “es bajo a esas premisas bajo las que queremos tener las mejores relaciones con Argelia, como las tenemos con todos nuestros vecinos”.

José Manuel Albares aseguró que el Gobierno está “analizando el alcance, las consecuencias prácticas tanto nacionales como europeas, de esa medida (de la banca) de manera serena, de manera constructiva, pero también de manera firme en la defensa de los intereses de España de los españoles y de las empresas españolas”.

Sobre si peligra el suministro de gas argelino por la citada congelación de las operaciones comerciales, el titular de Exteriores aseveró que “el flujo de gas, en la línea habitual de Argelia, no tienen estos momentos ningún inconveniente”, y recalcó que “lo que nos trasladan las compañías gasísticas es que no hay ninguna dificultad con respecto a esta medida para que esto siga siendo así”.

En la misma línea, recordó “las palabras el día 24 de abril del Presidente de la República Argelina garantizando el suministro de gas a España”. Y añadió que “de la información que tenemos no hay ninguna dificultad en la línea habitual de suministrador fiable de Argelia sobre el gas”.

Acerca de los pasos que dará España desde el punto de vista diplomático, el ministro pidió “discreción, porque yo lo que busco es ser constructivo”, para que la relación con Argelia “sea la mejor posible y que nuestros intereses queden totalmente defendidos”.

El ministro no respondió sobre si el Ejecutivo fue informado por Argelia antes de que se emitiera el comunicado de suspensión del Tratado de Amistad o la decisión de la banca argelina de congelar sus operaciones con España.