Así lo declaró en la presentación del Alto Representante, Josep Borrell, antes de dar paso a la lección que el vicepresidente de la Comisión dictó en la Fundación Carlos de Amberes, en Madrid.

El responsable de la Cancillería consideró que “este es un momento decisivo por el desafío que nos plantea Vladimir Putin, que es un desafío claro y evidente a Ucrania, a su soberanía, a su integridad territorial”, pero que, en su opinión, “va mucho más allá y es probablemente el mayor desafío que hemos tenido los europeos desde la caída del muro de Berlín”.

“Estamos al inicio de la remodelación de lo que es el orden europeo, si me permiten esa palabra geopolítica”, aseveró Albares, y añadió que “no somos todavía conscientes más que de los contornos de ese nuevo mundo que estamos ya haciendo”.

Para el jefe de la diplomacia, “el desafío es muy grave, porque sobre todo es un desafío a nuestros valores, que son la base de lo que ha dado las mayores décadas de paz y de prosperidad a la Unión Europea”.

DOS MODELOS

En la misma línea, subrayó que en Ucrania se están enfrentando dos modelos, “un modelo que mira hacia el futuro y que es el de Europa, que cree en la pluralidad, en la diversidad, en la igualdad soberana de los Estados y que quiere que la guerra siga abolida y desterrada del continente europeo como forma de resolver conflictos”, frente a otro modelo “que mira al pasado, hacia épocas muy tristes y muy oscuras de Europa, épocas de muros y de alambradas, de soberanías limitadas, en el que la guerra es posible para resolver conflictos y que desde luego no cree en el pluralismo y en la diversidad”.

Ese último modelo, enfatizó el titular de Exteriores, “es un modelo que representa Vladimir Putin, un modelo que también tenemos que combatir dentro de nuestras propias sociedades europeas”.

“Ahora viene un momento en el que habrá un doble liderazgo español en Europa”, destacó José Manuel Albares, gracias “al liderazgo del Alto Representante que es español y lo pasea por el mundo, y el liderazgo de España en su presidencia de la Unión Europea”.

“Estamos a menos de nueve meses” de la citada presidencia española de la UE, recalcó Albares, y añadió que está seguro “de que los españoles vamos a estar a la altura”, ya que “la presidencia de la Unión Europea es un proyecto de país, como lo fue la pasada cumbre de la OTAN y el concepto estratégico que salió de ella”.

Para el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea, y Cooperación, “es un momento en el que va a ser necesario repensar definitivamente el mercado energético”, y apuntó que la ‘Brújula Estratégica’ que aprobó la UE este año no persigue “solamente una autonomía de sus industrias de defensa, sino también en aspectos tan importantes como los alimentos”, y además insta a “repensar a Europa como actor geopolítico y que su voz se oiga en el mundo y que por ejemplo vuelva a mirar con fuerza a la región más ‘eurocompatible’ del planeta, que es América Latina”, apostilló.