Así lo dijo Herrero en una rueda de prensa en la que planteó propuestas para asegurar el cumplimiento de las nuevas reglas fiscales y pidió la “máxima transparencia” en el proceso de establecimiento de objetivos, así como iniciar “ya” el diálogo con las comunidades autónomas.

La presidenta de la Airef aseguró que el Ejecutivo tiene que “iniciar de manera inmediata el diálogo con las administraciones territoriales”, ya que estas “están elaborando los presupuestos y deben tener claro cuál es el objetivo y el reparto del compromiso que figure en el Plan Fiscal Estructural”. A su juicio, el diálogo con las autonomías es “fundamental para garantizar el éxito del primer año de vigencia de Plan”.

“Podríamos decir que a cortísimo plazo formulamos la propuesta de que ya tiene que haber un diálogo con las administraciones territoriales para tener claro cuál es el compromiso para 2025 y cómo se va a repartir ese compromiso entre los distintos niveles de las administraciones”, recalcó, e insistió en la necesidad de que “las administraciones públicas conozcan cuál es el objetivo al que tienen que presentar su presupuesto para el año próximo”.

Herrero apostó por una correlación “más estrecha” entre los objetivos fiscales y la evolución del endeudamiento público” y recordó que el plan fiscal establecerá “que la deuda pública se va a reducir de manera sostenida y viable en el tiempo”, lo que supone “un reto económico para la economía española”.

Avisó de que “parece que el crecimiento económico no resulta suficiente para seguir provocando un descenso en la ratio de deuda sobre el PIB”, con lo que las previsiones de la Airef apuntan a que “en la segunda mitad de esta década se producirá una estabilización de la ratio de deuda ligeramente por encima del 100%”, mientras que para la próxima década “se iniciará una senda creciente asociada a la evolución de nuestra demografía”.

“No basta con que la deuda se estabilice, sino que tenemos que colocarla en una senda ascendente”, manifestó, ya que “lo exige el marco fiscal europeo y la situación de nuestras finanzas públicas”.

AJUSTE A SIETE AÑOS

Según las estimaciones actuales de la Airef, la aplicación de las reglas fiscales en España exigirá un ajuste fiscal de 0,63 puntos de PIB al año durante el periodo 2025-2028 o de 0,43 puntos al año durante 2025-2031, en el caso de que el periodo de ajuste se extienda a siete años ligado a la realización de reformas e inversiones. “Lo previsible es que nos vayamos a la opción de siete años”, señaló Herrero.

De este modo, según las previsiones de Airef se necesitaría un ajuste del gasto de "10.000 millones cada año" en un periodo de cuatro años. Sin embargo, si el periodo fuera a siete años el ajuste sería algo inferior, "de unos 7.000 millones".

El organismo estimó “con todas las cautelas” en un escenario de reglas fiscales un crecimiento promedio del gasto neto máximo del 2,7%, lo que supone un “ajuste exigente” dado el promedio histórico, con carácter general “situado por encima del 4%”. Asimismo, según la Airef el crecimiento promedio del gasto primario sería del 3,8%.

La Airef supuso que el ajuste exigido por Bruselas será “una tasa de crecimiento máximo del gasto” y con un margen “relativamente flexible”. Además, cada año se llevará a cabo “una parte proporcional” del ajuste.

TRANSPARENCIA

Herrero reclamó que el Gobierno haga pública la tasa de referencia fiscal pactada con Bruselas, junto con una mayor “transparencia en la negociación y en el proceso de elaboración del Plan Fiscal Estructural”. Puso el ejemplo de Austria y Holanda, quienes “ya han publicado sus trayectorias” y pidió el “mayor consenso posible”.

“Sería deseable que el plan fiscal pase por el Parlamento para informar de a qué nos estamos comprometiendo en los próximos 4 años, ya que los compromisos son estables y no pueden modificarse”. Asimismo, apostó por la convocatoria del Consejo de Política Fiscal y Financiera para “buscar el consenso y sentar las bases de la reforma”, así como la Conferencia de Presidentes.

Por otro lado, la presidenta de la Airef defendió “cuadrar el marco fiscal nacional con el europeo”. “Tenemos de plazo hasta finales de 2025”, dijo, y lo contrario conllevaría una “falta de credibilidad”, ante la “falta de consistencia entre el marco fiscal nacional y el europeo”.

Por último, Herrero advirtió de que si la reforma del marco fiscal español no “va de la mano” de la reforma del sistema de financiación autonómica “habrá grietas en la credibilidad del marco fiscal”.