Las mismas fuentes señalaron que han sido los propios pescadores de La Gomera los que han pedido que esta zona pase a formar parte de la red de resevas marina, que se extiende a lo largo del litoral mediterráneo y las islas canarias.

Si finalmente se crea esta reserva se uniría a las nueve que ya hay en España: Islas Medes-Ses Negres, Islas Columbretes, Cabo San Antonio, Isla Tabarca, Cabo de Palos e Islas Hormigas, Cabo de Gata-Nijar, Isla Graciosa e islotes del norte de Lanzarote y Punta Restinga-Mar de las Calmas.

El objetivo marcado por el Gobierno es completar la lista hasta que quede integrada por quince espacios en el horizonte de 199. Para ello, contará con ayuda de la Unión Europea, ya que de los 7.700 millones de pesetas que está previsto invertir en los próximos años para crear y gestionar reservas marinas y arrecifes, cerca de 5.000 serán aportados por la UE a través de los Fondos Estructurales.

La declaración de una zona como reserva marina permite realizar una explotación racional de los recursos pesqueros, prohibiendo artes de pesca no selectiva, respetando los ciclos reproductivos de las distintas especies y defendiendo alos pescadores autóctonos contra la desigual competencia que plantean las grandes flotas.

Además de la de La Gomera, Agricultura analiza la posibilidad de crear otras tres a corto plazo: una en la zona de Alborán, entre el litoral andaluz y la costa marroquí; otra en el entorno de Formentera, en Baleares, y una tercera en Morro Jable, al sur de la isla canaria de Fuerteventura.