Para Aedenat, el problema de fondo estriba en que todos los sistemas se diseñaron para trabajar en 12 meses. "El cambiar combustible gastado cada 18 meses en lugar de cada 12", señala el comunicado, "implica someter a tensiones térmicas y mecánicas al núcleo del reactor, lo cual provoca dformaciones en las barras de control y en los elementos combustibles y ahora obliga cambiar los palpadores".

Según la organización ecologista, el exceso de quemado de los elementos combustibles a que da lugar el funcionamiento en ciclos de 18 meses somete a los diversos elementos del núcleo de los reactores de las dos unidades de Almaraz a grandes tensiones mecánicas y térmicas, que se manifiestan en deformaciones de la geometría del núcleo.

Estas deformaciones, según el colectivo ecologista, vana obligar a sustituir los palpadores de las guías de las barras de control.

Los palpadores son unas piezas que sirven para medir con precisión la posición de las barras de control. La posición de éstas determina, junto con otros elementos, el ritmo de la reacción nuclear y, por tanto, la potencia producida por el reactor.