En declaraciones a Servimedia, un portavoz del administrador ferroviario explicó que estos políticos no han podido acceder a dicho túnel porque no pidieron la autorización necesaria para visitar las obras.

Por ello, ambos dirigentes autonómicos del Partido Popular han tenido que conformarse con contemplar el túnel desde un monte cercano, situado en unos terrenos propiedad de la Comunidad de Madrid.

Según el portavoz de ADIF, "nadie puede visitar unas obras sin pedir permiso y sin comunicárselo a nadie, porque este tipo de visitas se organizan con mucha antelación y una vez que están cubiertos los requisitos de seguridad y avisado el personal de seguridad de la obra y los trabajadores se autorizan".

"Con el objetivo de preservar la máxima seguridad de las personas y de mantener el desarrollo normal de los trabajos, ADIF mantiene un estricto control de las visitas a las obras conforme a la legislación vigente al respecto", defendió el portavoz quien aseguró que el administrador de infraestructuras ferroviarias "quiere reiterar su compromiso con la transparencia en cuanto a todas sus actuaciones".

De hecho, ADIF no ha recibido ninguna solicitud para visitar durante el día de hoy las obras de este túnel de la línea Madrid-Valencia que ha levantado la polémica entre el Gobierno y el PP, al entender el partido de la oposición que el Ministerio de Fomento ha tratado de ocultar lo ocurrido.

Por su parte, tanto Fomento, como ADIF y las empresas que trabajan en dichas obras, Acciona y Aguas Subterráneas, defienden que el derrumbamiento es un "incidente técnico de poca importancia" por lo que no se consideró necesario informar a la opinión pública.