En una entrevista concedida a Servimedia, el doctor Cohen acusó también a la Administración sanitaria de amparar la "fagocitación" de la estética por la plástica mediate el nuevo decreto de especialidades, y de dar la espalda a una especialidad que se ha desarrollado al margen del Sistema Nacional de Salud y de su sistema de formación.

A su juicio, ésta debe realizarse vía MIR, pero sufragada por el propio médico, "porque no parece lógico que el Estado pague la cualificación de un especialista que se va a dedicar a una actividad totalmente privada y con fines estéticos", dijo.

Por ello, el doctor Cohen rechaza la propuesta del presidente de la Comisión Naciona de Especialidades de solucionar la formación en estética con una rotación de tres meses de los residentes de plástica, "porque en tres meses no puede formarse a un médico en cirugía estética", dijo.

Esta posición la defendió ante el Ministerio de Sanidad y el anterior subsecretario, Domingo Menéndez, se limitó a contestar que en el plazo de unas semanas se aprobaría el real decreto de regulación de especialidades que cambia la denominación de la Cirugía Plástica y Reparadora por Cirugía Plástica, Esttica y Reparadora.

Recordó que la concepción de la plástica es diametralmente opuesta a la estética, una práctica que cada día es menos invasiva e intervencionista. "No se puede aplicar el mismo criterio quirúrgico para operar un tumor de parótidas que para quitar cuatro patas de gallo", dijo.

Tan distinta es, añadió el doctor Cohen, que el 76% de las demandas que se presentan en todo el Estado por intervenciones de tipo estético corresponden a cirujanos plásticos.

ADMINISTRACION, CULPABLE

El presidente de los estéticos tiene claro que la Administración es la culpable de una falta de definición y regulación en el campo de la estética, debido, a su juicio, a que las intervenciones de este tipo no están cubiertas por la financiación pública.

En España se producen al año unas 300.000 intervenciones de cirugía estética y las complicaciones no suponen más de 30, con lo que "estamos hablando de una incidencia muy baja, del 0,01%".

Para esta organización profesional, es incierto el futurode la especialidad, "que nació de actuaciones que algunos especialistas abandonaban" y cuyos profesionales se han ido formando viajando a otros países, como Brasil, para aprender unas técnicas que no se enseñaban en el país.