ACTIVISTAS DE GREENPEACE IMPIDEN DISTRIBUIR SOJA TRANSGENICA A UNA EMPRESA DE BARCELONA
- Según la organización, España es el único país de la UE que permite el cultivo comercial de cosechas genéticamente modificadas
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na treintena de activistas de Greenpeace de diez nacionalidades diferentes ocuparon a las 9 de esta mañana las istalaciones que la compañía Moyresa tiene en el puerto de Barcelona, con el fin de impedir la distribución de soja transgénica a la citada empresa, uno de los mayores importadores de España.
Según informó la organización ecologista, en la acción participan miembros de la tripulación del buque insignia de Greenpeace, el "SV Rainbow Warrior", y su objetivo es evitar la contaminación de la cadea alimentaria por organismos modificados genéticamente.
Los activistas, que portaban una pancarta en la que se podía leer "Contaminación Genética-No Compres", han bloqueado las instalaciones donde se cargan los camiones con harinas de soja, mientras otros desplegaban una pancarta gigante en los silos de almacenamiento con la frase "España no quiere transgénicos" en castellano y en inglés.
Según Greenpeace, Moyresa controla el 71% del mercado español de molturación de soja y el 67% del mercado de ceite de soja. La soja procesada se utiliza en muchos alimentos y como pienso para animales. Recientemente, según la organización, la propia empresa admitió que habitualmente mezcla la soja no transgénica importada con soja transgénica.
Lo que demanda Greenpeace es que Moyresa se comprometa "inmediatamente" a suministrar soja no transgénica al mercado español.
"La lista de ejemplos de contaminacion genética, legislación inadecuada y preocupación social por los cultivos transgénicos crece día a dí. Los cultivos transgénicos solamente han aportado riesgos de nuevas alergias, menor rendimiento agronómico, mayor dependencia de la industria química, mayor control corporativo y pérdida de biodiversidad. Este experimento genético descontrolado tiene que acabar", advirtió Juan Felipe Carrasco, responsable de la Campaña de Transgénicos de Greenpeace España.
En este sentido, Greenpeace pide al Gobierno español que, dentro de la Presidencia europea que ostenta, endurezca la legislación para restringir e cultivo y la importación de organismos modificados genéticamente (OMGs).
CULTIVO COMERCIAL
Según Greenpeace, España es el único país de la Unión Europea que actualmente permite el cultivo comercial de cosechas genéticamente modificadas. Asimismo, más de 3 millones de toneladas de soja de Argentina y Estados Unidos fueron importadas a España el año pasado. También entraron un millón y medio de toneladas desde Brasil, país en el cual el cultivo de OMGs es ilegal.
Para apoyar su demanda, Greenpeae recuerda una encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) de marzo de 2001, en la que dos de cada tres encuestados afirmaba preferir no comprar productos vegetales que contengan OMGs, y un 85% de ellos aseguraba que no los adquirirían aunque fuesen significativamente más barato.
"Este estudio es una muestra más del rechazo que existe en Esuropa hacia los OMGs, tal y como ha evidenciado recientemente el Eurobarómetro encargado por la UE, según el cual el 70,9% de los europeos rechaza losalimentos con OGMs", concluye Greenpeace.
(SERVIMEDIA)
14 Feb 2002
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