Así lo indicó en declaraciones a los medios de comunicación desde la sede nacional del partido, donde apuntó que está prevista esta semana una toma de contacto entre los equipos negociadores con el líder del PP en Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco. “Únicamente esperamos ver en esa primera toma de contacto si el PP tiene disposición para negociar un gobierno con Vox”.

Abascal destacó que han visto un Mañueco “con la mano tendida, dispuesto a reconocer el resultado de las elecciones y la importancia que Vox tiene en Castilla y León”. Por ello, confió en que eso se traduzca “en unas negociaciones que puedan ser fructíferas”.

En este sentido, añadió que, “por nuestra parte no va a quedar, vamos a seguir con la mano tendida y vamos a hacer un gran esfuerzo para que, desde una manera constructiva y dialogante, podamos llegar a un acuerdo en Castilla y León”.

Preguntado por el sentido del voto de Vox en Castilla y León, Abascal respondió que, “si el PP decide que no tenemos el derecho que los ciudadanos nos han otorgado para formar parte del gobierno, pues votaremos claramente en contra, ya lo dijimos durante toda la campaña electoral”.

“Dijimos que nuestros votos no iban a servir para frustrar la alternativa y no van a servir para frustrar la alternativa ofreciéndole un cheque en blanco o una investidura gratis al señor Mañueco ni en forma de votos a favor ni en forma de abstención”, aseveró.

Por ello, “si el PP decide que no tiene derecho a formar parte del Gobierno y que, por tanto, los electores de Vox valen menos que los electores de otro partido, debe saber que debe alcanzar un acuerdo de cualquier tipo con el PSOE, porque si no la repetición de las elecciones será algo inevitable y la responsabilidad la tendrá quien no trata a todas las fuerzas políticas por igual y quien no trata a todos los electores por igual”, concluyó Abascal.