Así se expresó Aagesen en la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, donde fue preguntada por el diputado del PP Guillermo Mariscal sobre el calendario de cierre de las centrales nucleares, que tachó como “un suicidio energético”.

“El sector energético está liberalizado”, recordó la vicepresidenta, quien negó el impacto del cierre nuclear en la seguridad de suministro porque “tenemos la energía más competitiva de Europa”. A este respecto, lamentó que “solo el exterior reconoce el éxito de la transición energética en España” y valoró el interés inversor en el sector energético del país.

Por su parte, Mariscal denunció que el cierre nuclear “compromete la seguridad de suministro, encarecerá la factura y aumentará las emisiones”. También denunció que “somos el único país del mundo con centrales operativas que ha decidido cerrarlas”.