El 96% DE LOS ADOLESCENTES LATINOS NIEGAN PERTENECER A BANDAS URBANAS Y LES INDIGNA QUE SE LES CATALOGUE COMO PARTE DE ELLAS
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El 96% de los adolescentes procedentes de países latinoamericanos que viven en España niegan pertenecer a alguna banda y aseguran que les indigna que se les considere miembros de ellas, según indicó hoy el antropólogo Carles Feixa, quien definió las tribus urbanas como una forma de expresar las experiencias sociales de los jóvenes mediante la construcción de estilos de vida distintos.
Feixa, que participó en el Congreso Internacional 'Ser adolescente, hoy', con la ponencia "¿Tribus? ¿Urbanas?", recordó los orígenes de estas bandas.
El antropólogo analizó a los Latin Kings como producto y ejemplo paradigmático del proceso de transnacionalización de las culturas juveniles en la era digital y dijo que se han convertido en una especie de "franquicia" transnacional con múltiples conexiones locales, que importan formas de vestir, estilos musicales, comportamientos, actitudes e incluso producciones culturales.
Una de estas producciones es la de la Biblia LK que dice, entre otras muchas cosas, que hay que "proteger y asegurar la existencia cultural del pueblo latino y de nuestros antepasados".
Además del fenómeno de las bandas latinas, el congreso, que se está celebrando en Madrid organizado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción, abordó hoy aspectos como el maltrato en la escuela, el culto al cuerpo y los trastornos en la alimentación y el consumo de drogas.
MALTRATO EN LA ESCUELA
Con respecto al maltrato en la escuela, la catedrática de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Córdoba Rosario Ortega señaló que entre un 13% y un 35% de los adolescentes protagoniza alguna vez actitudes y comportamientos intimidatorios y abusivos
La psicóloga considera que "el maltrato entre iguales o 'bullying' está presente en la práctica totalidad de las escuelas e instituciones y es un importante factor de riesgo para el desarrollo de los escolares".
No obstante, Ortega aclaró que para que el maltrato entre iguales se convierta en "bullying" no debe ser puntual o esporádico, sino una secuencia de acciones repetidas entre unos protagonistas (agresor/es-víctima), cuya relación persiste en el tiempo y desarrolla una determinada dinámica.
"No sólo es importante la forma en la que se produce la agresión (violencia física, verbal, psicológica directa e indirecta o violencia sexual), sino el nivel de daño psicológico, social y moral que el agresor produce en la víctima, el tiempo que ésta la padece y la indefensión que se deriva de no ser ayudada ni comprendida", explicó .
Para la psicóloga andaluza, "aunque ningún escolar está libre de riesgo", existen tres grandes factores psicogenéticos que influyen a la hora de verse implicado en fenómenos de maltrato entre iguales:
"La ausencia de afecto y calidez durante los primeros años de vida, la existencia y el uso de violencia física o psicológica en el seno del grupo familiar y las disciplinas extremadamente duras e incoherentes que estimulan la respuesta violenta de los adolescentes", apuntó.
(SERVIMEDIA)
23 Nov 2005
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