La declaración, cuya lectura fue secundada por un aplauso, declara el apoyo del Congreso de los Diputados a Sakineh Mohammad Ashtiani y se une al “rechazo internacional” que ha producido su condena.

Tras recordar que desde 1979 el adulterio se paga en Irán con la muerte por lapidación “según una particular interpretación de la ley islámica”, el Congreso de los Diputados insta al Gobierno iraní a revisar la sentencia y a anular la pena de muerte dictada contra Ashtiani, cumpliendo así “las previsiones del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del que la República de Irán forma parte”.

“El Parlamento quiere expresar su preocupación por la persecución que han sufrido los abogados que defendiendo los derechos humanos, en este y en otros episodios, se han visto obligados a abandonar el país”, dice la Cámara Baja, que expresa también su apoyo a la Unión Europea y a las Naciones Unidas en las gestiones diplomáticas que realizan para erradicar la pena de muerte en todo el mundo.

El texto recuerda que Resolución de la Asamblea General de Naciones Unidas de diciembre de 2007 llamó, “por primera vez en la historia, a una moratoria universal de la pena de muerte".