En declaraciones a Onda Cero, Imbroda indicó que se sienten desamparados por el Gobierno español y que "esta batalla política la ha ganado el Gobierno de Marruecos. Es así, porque políticamente se ha dicho lo que nunca debería haberse dicho".

"Nuestro gobierno ha dado dos mensajes muy claros: el primero, que nos callásemos, que fuéramos prudentes y que no protestásemos porque ofendíamos a Marruecos. Y en segundo lugar, se ha dicho de la visita de Aznar que es intolerable y casi una traición porque provoca y altera a Marruecos. Esas dos cosas han sido fundamentales para Marruecos. Ya ha ganado, no tiene que hacer nada más", dijo Imbroda, según un comunicado de la emisora de radio.

El presidente de Melilla asegura que "las funcionarias y los funcionarios policiales que trabajan en la frontera entre Melilla y Marruecos han estado "muy desamparados y son los que han sufrido principalmente el embate". "Si esto no sale publicado, hubiésemos estado así 30 años, con agresiones", apostilla.

Ante el boicot impulsado por activistas marroquíes, Imbroda subrayó la supervivencia de Melilla y apuntó que el quebranto económico que conllevaría un cierre de la frontera sería de "dos tercios" para Marruecos y "un tercio" para la ciudad española.

Por último, Imbroda denunció que durante el último año no han recibido llamada alguna del Ejecutivo. "Solamente me pidió hablar conmigo urgentemente el delegado de Gobierno de la ciudad para pedirme que no fuese a la frontera con la Prensa porque estaban negociando y eso podía causar un perjuicio a dicha negociación. A mí me llaman para pegarme la bronca públicamente como cuando salgo a defender lo que tengo que defender", concluyó.