El Parlamento de Cataluña da la puntilla a las corridas de toros

MADRID/BARCELONA
SERVIMEDIA

El Parlamento de Cataluña aprobó este miércoles por 68 votos a favor, 55 en contra y 9 abstenciones la prohibición de las corridas de toros en esta comunidad autónoma.

El debate final sobre esta iniciativa, que arrancó con la presentación de la ILP, acompañada por 180.000 firmas, por parte de la plataforma Prou!, se realizó, tras tres meses de debate, con la ausencia del presidente de la Generalitat, José Montilla, que llegó al hemiciclo para votar en contra.

La decisión final de la Cámara ha sido una incógnita hasta el último momento debido a la libertad de voto para los 85 diputados de CiU y PSC.

El PP catalán y el Grupo Mixto tenían claro desde el principio su votación en contra de la prohibición, al igual que ICV y ERC anunciaron desde la admisión a trámite de la propuesta su voto a favor. Así, desde el próximo 1 de enero de 2012 ya no existirán las corridas de toros en esta comunidad autónoma.

Durante el debate parlamentario, por parte del Grupo Mixto, el diputado de Ciutadans Albert Rivera acusó a alcaldes de grupos políticos que se muestran a favor de la prohibición de estar incumpliendo la ley en sus ayuntamientos con perros y gatos, ya que "no están haciendo nada para que 15.000 animales no sean atropellados en las carreteras cada año".

"No les quiero ver comer más foie, ni pescando en la Costa Brava y espero que no defiendan los 'correbous'" aseveró, porque eso, dijo, "se llama incoherencia e hipocresía". "Los partidos políticos no son animalistas sólo quieren prohibir los toros", subrayó.

El diputado del PP Francesc Sancho preguntó al PSC “de qué etica y moral habla” si apoya la prohibición de los toros y no del aborto.

Según explicó, el “porqué” de esta iniciativa es que “se trata de una tradición que compartimos con el resto de España” y aseguró que si el objetivo fusese la defensa de los animales “no se dejarían al margen otros espectáculos como los 'correbous'”.

Del mismo modo, se refirió a la responsabilidad financiera de Cataluña con el sector, que cifró en 400 millones de euros con esta iniciativa. “Una media de 250 euros para el bolsillo de cada familia catalana”, aseguró. Asimismo, afirmó que las personas “son las únicas que tienen derechos” y “el animal no tiene derechos a proteger”.

Finalmente, pidió a los diputados que prioricen el derecho a la libertad de los ciudadanos a los que representan “para que los catalanes puedan seguir participando en esta fiesta catalana que son los toros en Cataluña”.

Por parte del grupo Ciutadans PSC-CpC, David Pérez recordó que los miembros de la formación tenían libertad de voto en la votación y adelantó que “mayoritariamente” los parlamentarios de su grupo votarían en contra de la prohibición. “Hablamos de sentimientos y éstos no se pueden despreciar por ser minoritarios”, subrayó.

El diputado de CiU Josep Rull, dejó claro que “no hay enfrentamiento identitario entre Cataluña y España” en este ámbito porque “las corridas de toros tienen una tradición fundamentada en Cataluña”. “Hoy no hablamos de la catalanidad de los toros sino de si las tradiciones están fosilizadas”, aseveró.

Rull también destacó, en torno a la libertad de voto de los parlamentarios de Convergència, la divergencia de opiniones, ya que para algunos diputados la tauromaquia es una expresión cultural y artística; para otros, la no prohibición representa la defensa de la libertad, y otros creen que hay valores que no pueden quedar fosilizados.

Por su parte, el diputado de ERC Joan Puigcercós explicó que durante los tres meses de debate de la ILP, los biólogos han contrastado que no existe el toro de lidia y que no hay peligro de extinción, y “se ha demostrado que el toro sufre dolor cuando sale a la plaza”. “Estamos hablando del sufrimiento del animal y de nada más”, aseveró.

En su opinión, “el prohibido prohibir, no sirve” porque “tiene que haber prohibiciones cuando una sociedad avanza y progresa”.

También se mostró en contra del argumento que apuesta por que las corridas de toros desaparecerán solas, porque, se preguntó, “no habría que regular delitos con poca incidencia”.

Finalmente, por ICV Francesc Pané consideró las corridas de toros una “crueldad gratuita” y las calificó de “fiesta que espanta la sensibilidad y cierra los ojos a los inteligentes”, al tiempo que preguntó “por qué no dar el paso de liberar a los toros”.

“Más de 180.000 ciudadanos llaman a nuestra conciencia para abolir este espectáculo de bajas pasiones”, subrayó, y dejó claro que “no es una cuestión de Cataluña frente a España, sino de prevalencia de la ética humana y moderna”.

(SERVIMEDIA)
28 Jul 2010
CDM/lmb