En Afganistán, el punto más lejano donde hay militares españoles, hubo "algunos que no pudieron verlo" por el lugar en el que estaban, si bien la noticia de la victoria llegó hasta ellos.

Según fuentes militares consultadas por Servimedia, en la base de Qala-i-Nao se siguió a través de las pantallas de televisión de la cantina, mientras que en la base de apoyo avanzado de Herat colocaron grandes pantallas.

En Herat, italianos, españoles, estadounidenses y el resto de nacionalidades que están en este punto, hicieron una "piña" para animar a la selección que dirige Vicente del Bosque.

También se vibró en Líbano y en Bosnia-Herzegovina donde, en la base Miguel de Cervantes y la multinacional "Camp Butmir" se vio el partido en unas pantallas colocadas para ese momento histórico.

Según prensa local, en la localidad de Nakura (Líbano), donde está el cuartel general de la Fuerza Interina de las Naciones Unidas en Líbano (Finul), los militares españoles siguieron el partido en un gran televisor instalado en el rincón llamado la "Casa de España".

Se unieron a ellos militares de otras nacionalidades, como franceses, daneses y otros. La mayoría de los españoles tenían puesta la camiseta roja.