Según informó en un comunicado la compañía, ahora en manos del empresario Ángel de Cabo, el ajuste de la estructura pasa además "por el cese de actividad de los puntos de venta no estratégicos para el plan de viabilidad".

También se ajustaría la dimensión y estructura del departamento de empresas, "cuya actividad es casi nula a día de hoy pero que cuenta con cerca de 400 personas".

Igualmente, se procederá a un redimensionamiento en la estructura de los servicios centrales para adecuarlos al nivel de servicio necesario para la nueva organización. En este sentido, "los costes y gastos varios en general se verán reducidos notablemente".

Estos son algunos de los aspectos que la dirección de la empresa comunicó este viernes al comité intercentros en una reunión para analizar en futuro de la compañía.

ACTIVAR VENTAS

Otro de los pasos a seguir por la nueva dirección es activar las ventas y recuperar la actividad comercial. Durante esta semana se han mantenido reuniones y contactos para restablecer la relación con IATA y lograr que Marsans pueda volver a emitir billetes de avión, explicaron.

"La sensación tras los primeros contactos es buena y la compañía no descarta alcanzar un acuerdo en fechas próximas", aseguran.

En el mismo sentido, se han mantenido reuniones con touroperadores dispuestos a trabajar con Marsans, lo que permitiría que la empresa pudiera vender paquetes vacacionales y hoteles.

El tercer aspecto de la estrategia, que se suma a la reactivación de las ventas y la reducción de plantilla, es la venta de activos no estratégicos.

Los nuevos dueños aseguran que ya han recibido "numerosas llamadas de empresas interesadas en adquirir ciertos activos", y apuntan que el programa de desinversiones "se va a desarrollar de acuerdo con las entidades financieras y de forma ordenada, tratando de maximizar el valor de los activos que se vendan, evitando operaciones a cualquier precio".

VIABILIDAD

La nueva dirección de Viajes Marsans defiende que "ha sido en todo momento transparente desde la toma de control de la sociedad, y ha venido compartiendo los puntos anteriores con empleados, clientes, proveedores y entidades financieras, dejando constancia de su compromiso por dotar de viabilidad a la sociedad".

No obstante, afirman que "la viabilidad pasa por el apego al cumplimiento de los tres puntos". "La situación es tan sensible que los tres elementos sobre los que pivotará el nuevo plan de negocio deben cumplirse al cien por cien para garantizar la viabilidad de la sociedad", agregaron.