Así, han comenzado a trabajar con sus principales proveedores identificando las vías de reducción de su huella de carbono, de manera que ayuden disminuir las emisiones tanto de la operadora británica y como la de sus clientes, según se afirma en su memoria de responsabilidad social.

De esta manera han constituido grupos de trabajo con el fin de conseguir reducir los costes energéticos de de sus equipos de red y estaciones base, y han comenzado a usar energías renovables para la alimentación de estos equipos.

Durante el pasado año identificaron nueve proveedores globales con los que han comenzado los trabajos, entre los que se figuran tres proveedores de redes. Se ha establecido un marco de colaboración conjunta de iniciativa de reducción de emisiones, entre las que figuran mejoras en los centros de datos de la compañía.

A través de su participación en el Carbon Disclosure Project’s han realizado un cuestionario a 235 proveedores globales y locales estratégicos, con el fin de conocer cuales eran sus emisiones de gases de efecto invernadero.