Según la fundación, en los tres primeros trimestres de 2017 la economía catalana creció “por encima de la media nacional, en especial por la construcción y la industria”, y señala que aún “son escasos los datos del comienzo del cuarto trimestre para evaluar el posible impacto del conflicto secesionista”.

Además, explica que estas previsiones se han realizado bajo un escenario en el que la situación política “se normaliza progresivamente a lo largo del primer trimestre de 2018”, de modo que el impacto se limitaría al trimestre actual y al primero del próximo año, periodo en el que el crecimiento podría reducirse a la mitad en comparación con el inicialmente previsto.

Cataluña será la tercera comunidad que menos crezca el año que viene, por detrás de Extremadura (1,4%) y Asturias (1,6%). En el lado opuesto, Madrid liderará las subidas del PIB, con el 3,3%, seguida de Galicia y Comunidad Valenciana (ambas con el 3%).

Para Funcas, las diferencias de crecimiento entre unas zonas y otras, cerca de dos puntos porcentuales entre la mejor y la peor, “se explican principalmente por la capacidad para aprovechar el tirón del comercio internacional y de la recuperación europea, en menor medida por la situación de las cuentas públicas y, por último, por un posible efecto desvío de inversiones por la crisis catalana que aprovecharían las comunidades más próximas, sobre todo Aragón y Valencia, además de Madrid”.

En materia de empleo, la evolución será favorable en todas las comunidades. Cuatro reducirán su tasa de paro por debajo del 10% (Baleares, Navarra, País Vasco y La Rioja). Sin embargo, el desempleo todavía superará el 20% en Andalucía, Canarias y Extremadura.