Después de que el arzobispo terminara la Consagración-momento central en el que se bendice la Hostia-, el órgano del Arzobispado entonó el himno nacional ante la presencia del jefe del Estado Mayor de Ejército de Tierra (JEME), general Fulgencio Coll.

Posteriormente, al término de la eucaristía, se homenajeó a los caídos entonando "La muerte no es el final", según relataron a Servimedia algunos de los presentes en la catedral castrense, en honor a los diplomados de estado mayor que han fallecido.

La última ceremonia religiosa celebrada en la que durante la consagración sonó el himno nacional, antes de que se aprobara el nuevo Reglamento de Honores Militares, fue el funeral por los cuatro marinos muertos en Haití.

Este acto en el Arzobispado era el primero de los tres actos organizados desde el Ejército de Tierra para la conmemoración del Bicentenario del Cuerpo de Estado Mayor. En la tarde del miércoles, un concierto este miércoles en el Auditorio Nacional será el segundo de los actos conmemorativos.

El principal tendrá lugar este jueves. El Príncipe presidirá mañana el acto central en la Escuela de Guerra. Inicialmente estaba previsto que el Rey acudiera a este acto, según indicaron a Servimedia fuentes militares.

La celebración, que tenía caracter voluntario, fue presidido por el arzobispo castrense Juan del Río junto con el jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra (JEME), general Fulgencio Coll.

El acto principal de conmemoración tendrá lugar este jueves en la escuela de Guerra. Bajo la presidencia del Príncipe -que al igual que el Rey no es diplomado de Estado Mayor-, ante la presencia del JEME, de los anteriores jefes del Ejército, y de una representación de las distintas promociones de diplomados.

Tras las palabras de bienvenida del general Coll, quien ha elegido directamente al ex general Luis Alejandre, ex JEME; para que diera el discurso principal del acto. El actual director de la escuela de Guerra, general Rafael Ezquerro, como anfitrión, también tendrá lugar para sus palabras.

Entre los presentes, como el más antiguo, el teniente general Jesús González del Yerro, ex director de la escuela, se encargará de portar la corona de laurel en el monumento homenaje a los caídos.

El monumento consiste en 5 urnas -dispuestas gracias a las donaciones de los diplomados- en las que se encuentran las 117 fajas de los oficiales de Estado Mayor que han fallecido en actos de servicios, bien sea en misiones o por actos terroristas, desde que naciera la escuela en 1842.