“La situación es tan complicada que todas las fuerzas constitucionalistas tendrán que hacer esfuerzos de pactar y ser generosos para intentar formar una alternativa política”, apuntó la dirigente de Ciudadanos en declaraciones desde Barcelona, donde se comprometió a “dejar las discrepancias políticas a un lado” y dialogar con partidos como el PP catalán y el PSC.

Criticó que el PSC haya incorporado a su lista a los comicios autonómicos a Ramón Espadaler, el máximo dirigente de la antigua Unió tras el abandono de Josep Antoni Duran i Lleida y, según subrayó Arrimadas, uno de los organizadores de la consulta del 9 de noviembre de 2014. “Cada uno elige a su compañero de lista”, dijo refiriéndose al primer secretario del PSC, Miquel Iceta, con quien también se comprometió a dialogar tras el 21-D.

No compartió la “alegría” del Gobierno respecto a la huelga general de ayer en Cataluña, después de que el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, valorase positivamente la actuación de los Mossos d’Esquadra al defender que sus intervenciones fueron proporcionadas, y calificó de “lamentable” cómo se vulneraron de nuevo los derechos de los trabajadores catalanes.