Según informó AI, la muerte de la turista española es el resultado de “un patrón reiterado de actuación” de las fuerzas de seguridad en Río de Janeiro, que “hacen un uso innecesario y excesivo de la fuerza letal”.

“La muerte de la turista española debe ser objeto de una investigación exhaustiva, inmediata e independiente por parte de las autoridades civiles", aseguró Jurema Werneck, directora ejecutiva de Amnistía Internacional Brasil.

Werneck explicó que Rocinha y otras favelas en Río de Janeiro “sufren cotidianamente” acciones de la Policía que “suelen resultar en decenas de personas muertas”.

Expuso que AI ha documentado que muchas de estas muertes son “ejecuciones extrajudiciales” o el resultado del “uso innecesario y excesivo de la fuerza”, a pesar de que la Policía afirme que éstas son efectuadas en “legítima defensa”.

Al mismo tiempo, puso de manifiesto que este año más de 700 personas han fallecido en Río de Janeiro como resultado de la acción policial.

Por ello, exigió la puesta en marcha de “medidas urgentes” para reducir las “intervenciones letales” de la Policía para acabar con las “ejecuciones extrajudiciales” y conseguir que las “personas sospechosas de responsabilidad penal por tales crímenes sean llevadas ante los tribunales ordinarios de justicia”.