"El ataque por parte de los activistas había sido planificado previamente. Los barcos navegan en este momento rumbo al puerto de Ashdod", subraya la legación diplomática en un comunicado.

La Embajada que dirige Rafael Schutz, tras lamentar "mucho" la pérdida de vidas humanas, destaca que "la actuación no pacífica de los activistas pro-Hamás en los barcos es una prueba más de sus verdaderos objetivos" porque, a su juicio, "la organización que esta detrás de esta flotilla, la ONG turca IHH, tiene contactos con bandas terroristas fundamentalistas islámicas y las financia".

Desde la Embajada israelí en España insisten en que los activistas de la flotilla y sus organizadores rechazaron los "reiterados ofrecimientos" de Israel para hacer llegar la ayuda humanitaria a Gaza a través del puerto de Ashdod y "poner fin a la provocación", que es como definen este hecho.

Ante todo esto, Israel mantiene que "lo sucedido refuerza la necesidad de frenar el contrabando de armas y el paso de terroristas a la franja de Gaza" y que "ningún país habría tolerado una violación así de su soberanía y un ataque hacia sus ciudadanos y soldados".

La embajada entiende que la "Flotilla de la Libertad" no es más que "una provocación al servicio de las mentiras de Hamás" y que su objetivo es "exclusivamente político y propagandístico" de "apoyar al gobierno del grupo terrorista Hamás. De hecho, algunas de las organizaciones participantes financian grupos terroristas islamistas radicales", concluye el comunicado.