Investigadores españoles descubren el mecanismo responsable de la producción de anticuerpos

MADRID
SERVIMEDIA

Investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares Carlos III (CNIC) han descubierto el papel que desempeña un regulador transcripcional, denominado CTCF, en la producción de anticuerpos, lo que permitirá avanzar en la investigación de vacunas y cuyos resultados han sido publicados este miércoles en la revista ‘Nature Communication’.

Según el CNIC, este estudio describe como CTCF es absolutamente necesario para que los linfocitos B puedan proteger de forma correcta el organismo de las infecciones y los patógenos. En ausencia de este regulador, el sistema inmune no funcionará adecuadamente.

Los linfocitos B son los responsables de generar anticuerpos que protegen de estas infecciones. A este respecto, la doctora Almudena Ramiro, que lidera esta investigación, afirmó que “un proceso fundamental en la generación de los anticuerpos se produce en los llamados centros germinales, unas estructuras donde los genes de los anticuerpos sufren pequeñas modificaciones que permiten respuestas inmunes más eficientes y especializadas”.

“Como resultado de la reacción de centro germinal se generan dos tipos de células: células plasmáticas secretoras de anticuerpos, que eliminan la infección, y linfocitos B memoria, que permanecen como un reservorio de células que recuerdan la primera infección y permiten una actuación más rápida y eficiente en caso de infecciones sucesivas. Así, los centros germinales son cruciales para el efecto protector de las vacunas”, añadió.

Para que se generen estos centros germinales se requiere que los linfocitos B ejecuten un programa transcripcional complejo, que les permite dividirse intensamente, modificar sus genes de anticuerpos y sufrir procesos de selección que inducen la supervivencia o la muerte celular.

(SERVIMEDIA)
05 Jul 2017
ABG/gja/caa