En rueda de prensa, Ferrer admitió que las organizaciones sindicales "tememos" que el plan de ajuste del gasto público "venga acompañado de recortes de derechos sociales", que darían pie a la convocatoria de la huelga general.

El dirigente sindical reiteró que UGT, junto a CCOO, están impulsando una "respuesta masiva" en forma de manifestación que podría celebrarse el próximo 8 de junio, coincidiendo la huelga en la función pública.

En este sentido, aseguró que esta movilización "no descarta ningún tipo de actuación", lo que "evidentemente incluye la huelga general".

En cuanto a la evolución de la negociación para la reforma laboral, Ferrer reiteró que las organizaciones sindicales esperan que la próxima semana pueda haber, "si no un desenlace, sí saber si hay posibilidades de acuerdo".

Así, aseguró que tanto CCOO como UGT están impulsando la negociación y añadió que "la prioridad" sigue siendo lograr un acuerdo.

Además, sobre las palabras del ministro Corbacho en las que afirmaba que si no hay acuerdo y el Gobierno tiene que imponer su reforma, será también responsabilidad de las organizaciones sindicales; Ferrer acusó al Ejecutivo de querer quitarse "la pelota de su tejado". En esta línea, reclamó al Gobierno que "estimule la negociación" y que "no hable de imposición.

CONSUMADO EL RECORTE DE DERECHOS

Ferrer lamentó que el Consejo de Ministros de este jueves "consumó el recorte" que afectará a "las rentas medias y bajas del país".

Para Ferrer, se trata de "un atentado" contra los acuerdos de diálogo social alcanzadas en la pasada legislatura, y agregó que "vulnera y debilita" el sistema de dependencia, los acuerdos en la función pública y las pensiones.