Garzón denuncia la exclusión del PCE en un acto sobre las elecciones de 1977 en el Congreso
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El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha registrado un escrito ante la Mesa del Congreso de los Diputados quejándose por la exclusión del PCE en un acto que se celebrará este viernes para conmemorar la celebración de las primeras elecciones democráticas, en 1977, al que sí ha sido invitado Rodolfo Martín Villa, reclamado por un juzgado de Argentina que investiga crímenes franquistas.
El acto ha sido organizado por la Asociación de ex Diputados y ex Senadores de las Cortes Generales, fue autorizado por la Mesa y se celebrará este viernes en dependencias parlamentarias.
Garzón denuncia habrá representantes de UCD, de la antigua Alianza Popular o del PSOE pero se ha excluido al PCE, "protagonista indiscutible de aquel tiempo y de aquellas elecciones", y tampoco se ha invitado a ninguna mujer.
Sin embargo, dice en su carta, sí estará Martín Villa, al que se reclama en Argentina por los hechos ocurridos en Vitoria el 3 de marzo de 1976, con más de cien heridos y el asesinato de Pedro Martínez Ocio, Francisco Aznar Clemente, Romualdo Barroso Chaparro, José Castillo García y Bienvenido Pereda Moral.
Garzón considera que el Congreso "es un evidente espacio simbólico, además de político" y que la construcción de la memoria política "jamás resulta inocente, menos aún cuando la selección resulta excluyente y se escenifica en una sala central del Parlamento como es la Clara Campoamor, con un evidente impacto mediático y una acción legitimadora de largo alcance".
"IMPOSICIÓN" DE UNA MEMORIA DETERMINADA
Considera que en España "hay relatos y memorias en disputa, como corresponde a toda sociedad plural", y la Mesa del Congreso debe atender a esa pluralidad "desde el respeto a los valores democráticos y los derechos humanos". Por ello, "la imposición de una memoria determinada, excluyente con quienes lucharon contra la dictadura, cruzada además por la glorificación de figuras que precisamente no representan las libertades y la democracia, resulta cuanto menos preocupante 40 años después".
Garzón recurre a la ironía para asegurar que el acto, sin el PCE, sin mujeres y con un dirigente franquista reclamado por la Justicia de otro país "representa a la perfección todo aquello que criticamos sobre la Transición y su legado en la actualidad, pero les agradeceríamos que fueran menos explícitos".
Precisamente hace pocos días, recuerda Garzón, la Mesa ha denegado el acceso a la documentación sobre la investigación parlamentaria tras los sucesos de Málaga en 1977, cuando disparos de la policía mataron a Manuel José García Caparrós, siendo ministro del Interior Martín Villa, que "prometió unas responsabilidades políticas que nunca se materializaron".
La coincidencia de esas dos decisiones de la Mesa en pocos días, concluye Garzón, "nos ayuda a comprender mejor nuestra profunda crítica a lo que venimos denominando ‘Régimen de 1978’”. "Si de verdad quieren homenajear las libertades, la democracia y la pluralidad, si quieren transmitir lo mejor de aquel tiempo y mostrar aquellos errores que no deberíamos repetir, no permitan este acto sin mujeres ni comunistas donde, en cambio, se honra la memoria viva de un franquista", finaliza.
(SERVIMEDIA)
08 Jun 2017
CLC/gja