Ridao insistió en que si socialistas y convergentes son capaces de mantener su acuerdo hasta que se debata en el Senado, Esquerra respaldará la iniciativa, aunque ello "no tiene que servir para frenar la sentencia del TC".

En su opinión, lo que pretenden los dos partidos grandes de Cataluña es "eludir el debate sobre una sentencia que está hecha y es catastrófica" y ganar tiempo para no tener que mostrar sus estrategias de futuro, cuando quede evidencia que el modelo autonómico se ha agotado.

Ridao no pudo confirmar si el PSOE respaldará la iniciativa en el Senado, aunque aseguró que le consta que lo están estudiando. "Supongo que el PSOE está deshojando la margarita y si el PSC se arriesga, es que debe contar con su apoyo, pero no me consta".

El tripartito y CiU pactaron ayer en el Parlament una propuesta de reforma del Tribunal Constitucional (TC) que, de prosperar, cerraría definitivamente la puerta a que se emita una sentencia sobre el Estatut y acabaría con un debate que se ha prolongado durante cuatro años.

El texto que integrará la proposición de ley constará de cuatro puntos. El primero, ya conocido, propone que los miembros del tribunal cuyo mandato haya caducado cesen en un máximo de seis meses. Su aplicación supondría la salida y sustitución inmediata de cuatro magistrados. El segundo punto aboga por que cualquier dictamen sobre un estatuto requiera una mayoría cualificada de ocho miembros del Constitucional, de un total de 12, para ser aprobado.

En la práctica, y a la vista del pulso que se vive entre el sector progresista y el conservador del TC, eso impediría que actualmente prosperase una decisión sobre la Carta catalana.

El mismo punto reclama que exista un límite de tiempo para dictaminar sobre un estatuto desde su aprobación. El periodo concreto que se propondrá está por cerrar.