Refugiados. Acnur nombra a la nadadora siria Yusra Mardini 'Embajadora de Buena Voluntad'

MADRID
SERVIMEDIA

La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) ha nombrado como Embajadora de Buena Voluntad a Yusra Mardini, la joven refugiada siria que compitió en los Juegos Olímpicos de Río 2016 formando parte del primer Equipo Olímpico de Refugiados.

Según Acnur, Yusra Mardini se ha convertido a sus 19 años en "una poderosa voz para aquellas personas desplazadas forzosamente en cualquier lugar del mundo y en un valioso ejemplo de su resiliencia y determinación a la hora de reconstruir sus vidas y contribuir positivamente a las comunidades de acogida".

"No es ninguna vergüenza ser un refugiado si recordamos quiénes somos. Todavía somos los médicos, ingenieros, abogados, profesores, estudiantes que éramos en casa. Todavía somos madres, padres, hermanos y hermanas. Fueron la guerra y la persecución las que nos forzaron a huir de nuestros hogares en busca de paz. Eso es ser un refugiado. Eso es lo que soy. Eso es lo que somos todos aquellos que componemos esta creciente población de personas sin un país. Soy una refugiada y estoy orgullosa de defender la paz, la decencia y la dignidad de todos aquellos que huyen de la violencia. Únete a mí. Apóyanos”, declaró Yusra Mardini.

Mardini, que ha obtenido asilo en Alemania, se convierte así en la persona más joven en ostentar el cargo de Embajadora de Buena Voluntad y se suma a otros Embajadores como el presentador de televisión Jesús Vázquez, la actriz Cate Blanchett y el escritor Khaled Hosseini, que colaboran con Acnur para defender la causa de los refugiados.

Celebrando el nombramiento de Yusra Mardini como Embajadora de Buena Voluntad de Acnur, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, Filippo Grandi, declaró: "Yusra es una fuente de inspiración. A través de su impresionante historia personal, Yusra encarna las esperanzas, los temores y el increíble potencial de más de diez millones de jóvenes refugiados en todo el mundo”.

HISTORIA

Cuando el motor de su embarcación dejó de funcionar entre Turquía y la costa de la isla griega de Lesbos, en la última etapa de un largo periplo para escapar de la ciudad siria de Damasco, Yusra y su hermana se lanzaron al agua para empujar la embarcación y poner a todos los pasajeros a salvo. Ambas nadaron durante horas y arriesgaron sus vidas para salvar las de las 20 personas a bordo.

El Comité Olímpico Internacional reconoció el valor de esta joven nadadora de élite que se convirtió en miembro del primer equipo olímpico de atletas refugiados en competir en los Juegos Olímpicos de Río 2016.

Yusra Mardini es estudiante a tiempo completo en Alemania y sigue entrenando con las esperanzas puestas en participar en los próximos Juegos Olímpicos de 2020 en Tokio.

(SERVIMEDIA)
27 Abr 2017
JRN/caa