Se trata de un activo con una superficie bruta alquilable (SBA) de 12.000 metros cuadrados, distribuidos en cinco plantas. El inmueble cuenta con 339 plazas de coche y 70 de moto.

El edificio proporcionará unos ingresos anuales de 1,25 millones de euros durante los próximos dos años.

Desde Axiare destacaron que Sant Cugat es una "zona estratégica" de oficinas de Barcelona que goza de buenas comunicaciones mediante las autopistas C-16 y AP-7 y está situada a cinco minutos andando de la Estación Sant Joan.

Con esta operación, en los tres meses transcurridos de 2017 Axiare lleva invertidos 157,9 millones en la compra de cuatro inmuebles de uso terciario, que suman 46.354 metros cuadrados y cerca de 1.300 plazas de aparcamiento.