Tres de cada mil niños nacidos en España tienen síndrome de Asperger, un trastorno del neurodesarrollo que se encuadra en el espectro autista y que afecta sobre todo a la comunicación y las relaciones sociales.

Durante la inauguración del acto, el director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Borja Fanjul, recordó que este día internacional que se celebra mañana, sábado, es un “buen momento para dar visibilidad a este síndrome y eliminar estereotipos”.

Por ello, “desde esta dirección estamos trabajando codo con codo con las organizaciones para establecer una estrategia que permita satisfacer las necesidades de las personas con Asperger en todas las facetas de su vida. También trabajamos para reducir las desigualdades que existan entre las comunidades autónomas en cuanto a este síndrome, así como en una educación inclusiva y especializada para estas personas”.

A continuación, el presidente del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi), Luis Cayo Pérez Bueno, aseguró que “si tuviéramos que hacer hoy un retrato robot de la discapacidad nos saldría un rostro que, por desgracia, tendría el rasgo de la exclusión”.

“Es cierto que estamos en una situación de exclusión estructurada y casi sistémica, pero es posible cambiarlo con una toma de conciencia, empoderamiento y con un buen sistema normativo. Hemos comenzado a diversificar la discapacidad y dentro de ella hay segmentos y subsectores que están en una especial situación de exclusión, como las mujeres y niñas con discapacidad, las personas que viven en el medio rural y otras discapacidades que tienen un plus de exclusión, como el espectro autista y el síndrome de Asperger. Por ello, hay que buscar medidas innovadoras en política pública y de acción para reparar ese déficit añadido que tienen estas personas”.

Por todo ello, la Confederación Asperger España reivindica un mayor apoyo por parte de las administraciones públicas, una mayor visibilidad, una calidad educativa más equitativa, la lucha contra el acoso escolar, el establecimiento de un diagnóstico precoz y la puesta en marcha de la Estrategia Española en Trastornos del Espectro del Autismo, entre otras medidas.