Correos informó este viernes de que esta decisión ha sido adoptada por su Consejo de Administración y tiene como objetivo "una progresiva adecuación a costes y el mantenimiento de la calidad y eficiencia en la prestación del Servicio Postal Universal (SPU) a todos los ciudadanos".

Así, a partir del 1 de enero, las cartas y tarjetas postales nacionales requerirán un franqueo de 0,50 euros (en lugar de 0,45 euros) si son ordinarias y normalizadas, con un peso de hasta 20 gramos.

A pesar de esta "actualización" del precio, España seguirá figurando en 2017 entre los países de la Unión Europea con las tarifas postales más económicas, con una diferencia respecto a la tarifa media europea (0,61 euros) de 11 céntimos de euro por envío, y por debajo de Italia (0,95 euros), Reino Unido (0,75 euros), Francia (0,70 euros) y Alemania (0,70 euros).

FRANQUEO INTERNACIONAL

Por su parte, las cartas y tarjetas postales internacionales (ordinarias y normalizadas hasta 20 gramos) se franquearán con 1,25 euros (8,7% más) cuando el destino sea Europa, incluido Groenlandia, y con 1,35 euros (3,8% más) para el resto de países (en lugar de 1,15 euros y 1,30 euros, respectivamente).

De este modo, la actualización de tarifas de los productos incluidos en el SPU se sitúa en el 9,56%.

"Para establecer las nuevas tarifas, Correos ha seguido el procedimiento previsto en la Ley Postal", tras enviar esta propuesta -con al menos tres meses de antelación- a la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), quien verifica que se respetan los principios de precios asequibles, transparentes y no discriminatorios.