La campaña, que este año lleva por lema '#RefugiadosMigrantes. Manos a la obra para cambiar el rumbo' se desarrollará en 25 ciudades españolas a través de múltiples actividades. En un comunicado difundido este viernes, la ONG explica que "la campaña es una llamada a la sociedad para que se arremangue, cada cual desde su entorno y desde sus posibilidades, con el fin de descubrir que las personas refugiadas y migrantes son un bien" y, de este modo, responder a sus necesidades más básicas.

'Manos a la obra para cambiar el rumbo' contribuirá a la puesta en marcha de dos proyectos, uno en Siria y otro en el Líbano. En Alepo, Cesal colaborará con la Custodia de Tierra Santa para cubrir las necesidades más básicas de la población. Para ello apoyará la distribución de alimentos y la reconstrucción de algunas viviendas destruidas por los bombardeos. En el Líbano, además de seguir trabajando por atender necesidades inmediatas, la entidad buscará garantizar el derecho a la educación de niños y jóvenes.

"Nuestro principal objetivo ahora, y mientras los refugiados sigan viviendo en los campos, es apoyarles en la normalización de sus vidas", destaca Flavia Chevallard, cooperante de Cesal que trabaja en el Líbano. Por ello, una de las primeras acciones que se llevarán a cabo en el país será la reconstrucción de escuelas, dado que la falta de infraestructuras está impidiendo que muchos niños puedan ir al colegio.

"EMIGRAR O VOLVER LIBREMENTE"

"Nuestra labor", indica Pablo Llano, director de Cesal, "es promover el desarrollo en los países más pobres o en conflicto, en continua emergencia, de manera que emigrar se convierta en una decisión libre, no la única alternativa para salvar la vida".

Asimismo, la entidad señala como objetivo que "quienes ya se encuentran fuera de sus lugares de origen puedan regresar libremente a sus países si ese es su deseo, no una imposición o la única salida digna a la falta de integración en los países de acogida".

La ONG calcula que unos 500 voluntarios participarán en diversas iniciativas como las 'migas solidarias' en Villanueva de la Cañada, Getafe, Parla y San Martín de la Vega; la venta de trufas en Sevilla; la castañada en Móstoles, así como conciertos solidarios en Fuenlabrada y Madrid, entre otras. Estas actividades contribuirán a la financiación de estos de los proyectos de Siria y Líbano.