El obispo de Bilbao ve en la crisis de la Iglesia una “oportunidad” para acompañar más de cerca a los fieles

BILBAO
SERVIMEDIA

El obispo de Bilbao, Mario Iceta, reconoció hoy en el 'Fórum Europa. Tribuna Euskadi' que la crisis por la que atraviesa la Iglesia y el continuo descenso de fieles, supone un reto y también una oportunidad para “acompañar” a las personas de una manera más cercana. “Hemos de pasar de modo impersonal a modo personal”, dijo.

Durante su intervención en el citado encuentro informativo organizado por Nueva Economía Fórum, Iceta manifestó que “el que seamos menos” debe ser una oportunidad para “ganar en calidad” y se refirió a La Iglesia como un modo de “coaching” más antiguo. “Hoy en día la gente no necesita pagar a un psicólogo para que le escuche” ya que la Iglesia viene realizando esta labor desde siempre. El obispo de Bilbao reivindicó la calidad de la labor eclesiástica ante los retos y los problemas a los que tiene que hacer frente la Iglesia.

El prelado vasco remarcó la importancia de la labor evangelizadora no solo en la familia tradicional sino también, como recogen las palabras de Papa Francisco, en los matrimonios civiles, parejas de hecho, divorciados y vueltos a casar, “a través de la pedagogía de Dios”.

En este sentido, Mario Iceta alertó de que hoy en día existe una gran “fragilidad” en los matrimonios e hizo referencia a las estadísticas que revelan que estos han bajado en la provinicia de Vizcaya de 4.000 a 600 en un año, y que a los 5 años se rompen en toda España la mitad de los matrimonios, un porcentaje que baja al 30 por ciento en el caso de los matrimonios canónicos. El índice de rupturas aumenta hasta el 70 por ciento después de 15 años.

También recordó que la sociedad está cambiando y que ya en el País Vasco, uno de cada cuatro hogares es monopersonal. En todo el Estado, las personas que viven solas han pasado de 600.000 a 4 millones.

Durante el turno de preguntas, Iceta aclaró que la adecuación de Iglesia a los nuevos tiempos tiene su “ritmo” ya que la Iglesia “es muy grande y por tanto para que todo esto cale lleva su tiempo”. “La Iglesia genera procesos y va cambiando” matizó.

Según el prelado, el 52 por ciento de la población de Vizcaya se declara católico, dentro de este porcentaje, la porción de quienes se declaran practicantes ronda el 16 por ciento, lo que supone 160.000 personas que acuden regularmente a los servicios religiosos.

(SERVIMEDIA)
14 Dic 2016
r/isp