De forma paralela, el magistrado Andrés Martínez Arrieta se hará cargo de la instrucción del incidente de recusación interpuesto por Garzón contra Varela por supuesta parcialidad en la causa, según informaron fuentes del Supremo.

Andrés Ibáñez y Martínez Arrieta están considerados magistrados progresistas dentro del Tribunal Supremo, según las fuentes consultadas. El nuevo instructor de la causa contra Garzón fue vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y llegó al Tribunal Supremo en el año 2000.

Los dos magistrados deberán hacerse cargo de sus nuevas tareas debido al mecanismo de selección de instructores del Tribunal Supremo, una fórmula basada en la antigüedad de los magistrados. Andrés Ibáñez formó parte de la Sala que admitió a trámite la querella interpuesta contra Garzón por ordenar intervenir las conversaciones mantenidas en prisión entre los imputados del “caso Gürtel” y sus abogados.

Por su parte, Martínez Arrieta fue uno de los magistrados de la Sala que admitió a trámite la querella interpuesta contra Garzón por las subvenciones que el Banco Santander otorgó a los cursos que el juez impartió en Nueva York.

INSTRUCTOR SUSTITUTO

Andrés Ibáñez, que sustituirá temporalmente a Varela mientras se resuelve su recusación, tendrá plena capacidad para actuar en la causa contra Garzón, pudiendo incluso dictar auto de apertura de juicio oral para sentar al magistrado de la Audiencia Nacional en el banquillo de los acusados.

Aun así, más allá de lo que permite la ley, lo habitual es que los instructores sustitutos no tomen ninguna decisión de calado hasta que se resuelva definitivamente el incidente de recusación.

Mientras tanto, Martínez Arrieta, una vez se le eleve el incidente de recusación a la Sala de lo Penal, deberá dar tres días a la Fiscalía para que emita un informe. De forma paralela, el instructor tendrá diez días de plazo para practicar las pruebas solicitadas por las partes.

RECUSACIÓN

Estos dos magistrados harán la labor de instructores después de que este miércoles Varela decidiese admitir a trámite la recusación presentada contra él por Garzón , lo que supone que deberá apartarse, al menos temporalmente, de la causa abierta contra el juez de la Audiencia Nacional por su investigación de los crímenes del franquismo.

El juez de la Audiencia Nacional recusó a Varela porque, a su juicio, está ayudando a las acusaciones para que procedan contra él, demostrando “interés indirecto en el procedimiento y parcialidad en el mismo". Garzón se refiere al hecho de que Varela pidiese la semana pasada a Falange Española de las JONS –que finalmente fue expulsada del proceso-, a Manos Limpias y a Libertad e Identidad que presentaran nuevos escritos de acusación subsanando una serie de errores.

Lo primero que debe hacer ahora Varela es dar tres días a las partes –la Fiscalía y la acusación conjunta de Manos Limpias y Libertad e Identidad- para que presenten sus alegaciones al escrito de recusación presentado por Garzón, al que pueden adherirse u oponerse.

Al día siguiente de recibir los escritos de las partes, el propio Varela deberá realizar un informe pronunciándose sobre las causas de su recusación. Acto seguido, el magistrado elevará su informe y todos los escritos a la Sala de lo Penal, momento en el que se apartará formalmente de la instrucción de la causa.