Orange subraya en una nota que si se excluyen los impactos regulatorios, los ingresos habrían registrado un incremento del 2%. Asimismo, la operadora destaca que el descenso de la facturación mantiene la senda de moderación iniciada en la segunda mitad del año pasado.

Desde el segundo trimestre de 2009, cuando los ingresos registraron un descenso del 5,5%, la caída se ha ido moderando, pasando a un 4,7% en el tercer trimestre del año pasado y al 3,3% en los últimos tres meses del ejercicio.

En cuanto a la evolución del negocio de telefonía móvil, los ingresos disminuyeron un 2,5%, hasta los 759 millones de euros.

La compañía cerró el trimestre con un total de 11.552.000 clientes de telefonía móvil, un 1,1% más que el año anterior. Esta cifra incluye la baja de 448.000 clientes de prepago que no se identificaron en el plazo dado por el Gobierno.

De la base total de clientes de telefonía móvil, 6.747.000, un 4% más que el año pasado, pertenecen al segmento de contrato (un 58,4%) y 4.805.000 al de prepago.

Asimismo, hasta marzo Orange captó un total 121.000 nuevos clientes, de los cuales 89.000, el 75%, corresponden al segmento de contrato.

En cuanto a la unidad de telefonía fija, la facturación descendió un 4%, hasta los 164 millones de euros. La compañía cerró el trimestre con 1.086.000 clientes de ADSL.