Según informó el Departamento de Seguridad Nacional, estos aviones, gestionados por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente y pertenecientes al 43 Grupo del Ejército del Aire, están diseñados específicamente para incendios forestales, pudiendo operar tanto desde tierra como desde el agua. Cuentan con una capacidad de descarga de 5.500 litros, siendo capaces de utilizar agua de mar y operar con vientos superiores a los 30 nudos.

El comisario europeo para Ayuda Humanitaria y Gestión de Crisis, Christos Stylianides, ha realizado una petición expresa a los Estados miembros para aportar ayuda en la lucha contra incendios en Israel a través del Mecanismo Europeo de Protección Civil.

Por el momento, España, Grecia, Italia, Croacia y Chipre han respondido a la petición. También lo han hecho otros países como Rusia y Turquía, con el envío de un total de 10 medios aéreos.

La ola de incendios forestales afecta a Israel desde este martes y se ha visto agravada por los fuertes vientos en un contexto climatológico adverso con ausencia de precipitaciones en este otoño.

Ayer más de 80.000 personas fueron evacuadas de una decena de barrios de Haifa, además de dos campus universitarios y varios centros penitenciarios y médicos. Hasta el momento, solo se han producido afectados leves, en su mayoría por inhalación de humo.

Este jueves también se detectaron varios focos en los cruces de Shaar Hagay (acceso a las montañas que conducen a Jerusalén), las ciudades de Rishón Letzión, Savión, Modiín y Cesarea, los asentamientos judíos de Talamón y Oranit y los alrededores de la ciudad árabe-israelí de Umm El Fahem, además de otras zonas rurales. También se notificaron a última hora otros cinco incendios en bosques de la Galilea Superior. Ocho personas han sido detenidas como sospechosas de haberlos provocado.