Susana Díaz admite que el PSOE no tiene “mucho tiempo” para celebrar el Congreso Federal

- No comenta las represalias a los 'sanchistas' porque lo que haga la Gestora le parecerá siempre bien

MADRID
SERVIMEDIA

La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, reconoció este viernes que el PSOE no tiene “mucho tiempo” para celebrar el Congreso Federal, porque tiene que recuperar su proyecto ganador “cuanto antes” y no puede “estar aquí ‘sine die’”, por lo que se ha de acometer el proceso congresual “sin prisa pero sin pausa”.

Díaz hizo estas declaraciones en una entrevista en Canal Sur Radio recogida por Servimedia, horas después de que el expresidente del Gobierno Felipe González, en un acto en el que coincidió con ella, apuntara a marzo como una posible fecha para el Congreso Federal en el que el PSOE elegirá nuevo secretario general, previa votación de los militantes en primarias.

La presidenta andaluza dijo estar “de acuerdo con Felipe”, por lo que no se alejaría mucho tampoco de las exigencias de los partidarios del exsecretario general Pedro Sánchez, que reclaman que la Gestora se disuelva cuanto antes y convoque el congreso.

“Tenemos que recuperarnos pronto, no podemos estar aquí ‘sine die’, tenemos que tener un proyecto ganador”, proclamó, asegurando que no pasará mucho tiempo para ese congreso. “Mucho tiempo tampoco, porque no tenemos pronto. Hay que hacerlo sin prisa pero sin pausa”.

No obstante, Díaz también relativizó esta urgencia insistiendo en que “el PSOE tiene que hacer las cosas bien” y “no cerrar en falso ese congreso”, pues “si no hablamos del qué antes que del quién vamos a perder el tiempo porque no habremos analizado por qué la gente no ha confiado en nosotros” y ”se trata de saber qué PSOE queremos, de si queremos recuperarnos cuanto antes”.

En todo caso, prometió que no le va a “decir a la Gestora lo que tiene que hacer” y dijo que “lo que haga me va a parecer bien”, un cheque en blanco que también extendió, con la misma frase literal, cuando se le preguntó por la remodelación del grupo parlamentario aprobada ayer por la dirección temporal del partido, que apartó de sus cargos a diputados cercanos a Sánchez como Susana Sumelzo, Zaida Cantera y Sofía Hernanz. Díaz se limitó a constatar que los dirigentes federales “tendrán que poner a los mejores en cada sitio”.

De hecho, la presidenta de la Junta sólo admitió haber hablado con el presidente de la Gestora, Javier Fernández, para pedirle que defienda las pensiones de viudedad en sus conversaciones con el Gobierno, porque aseguró que aquélla está actuando “con responsabilidad y con cabeza en un momento muy complicado” y que confía en “el saber de Javier Fernández y Mario Jiménez”, éste último portavoz también del PSOE en el Parlamento andaluz.

PRIMARIAS

Por lo demás, Díaz prefirió seguir instalada en su versión oficial de que ella concurrirá o no a las primarias por la Secretaría General según lo que sus compañeros entiendan que debe hacer; le da igual estar “en la cola o en la cabeza del PSOE”, porque lo que quiere es “arrimar el hombro” y lo hace “gobernando”, que es lo que más molesta al PP.

Aventuró que si ella no hubiera ganado las elecciones el PSOE andaluz también estaría en crisis, porque “sólo somos útiles cuando la gente nos vota” y esto último ocurre cuando el PSOE ocupa “la centralidad, que no el centro”.

Díaz aseguró que no está intentando marcar posición a nivel nacional para preparar ese salto a la Secretaría General del PSOE, pero sí admitió tácitamente haber tomado parte en la rebelión interna contra Sánchez y el paso a la abstención.

“He hecho lo que creía que era mejor para mi partido y para mi país. Lo díficil es cuando hay que decir a los compañeros ‘la decisión que hay que tomar es ésta’. A partir de ahora, primero habrá que ver el proyecto que ofrece el PSOE y luego ver quién es el mejor o la mejor para ejecutarlo”, indicó.

En cuanto a la relación con el PSC, Díaz lamentó que “se han dicho muchas barbaridades” sobre su supuesto intento de romper el protocolo entre ambos partidos.

“Algunos me han hecho un traje desde Cataluña. Hay quien está empeñado en que haya una mala relación”, denunció, contraponiendo por su parte que “tiene que haber una buena relación pero de ida y vuelta, desde la lealtad y la generosidad mutua, y hasta ahora las cosas han sido mejorables”.

CIFUENTES

Ya fuera del tema orgánico de partido, Díaz insistió en criticar el “clasismo” y el “patriotismo de boutique” de la presidenta de Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, por su polémica mención de ayer a que su región aporta supuestamente recursos económicos de los que luego se beneficia la sanidad andaluza.

“Algunos que se envuelven en paraguas con la bandera luego hacen un discurso contra la igualdad de España y plantean los mismos temas que los que quieren romper España”, le recriminó.

La presidenta andaluza también ensalzó, en términos parecidos a los del discurso del Rey ayer en la apertura solemne de la legislatura, que en el pacto autonómico entre el PSOE y Ciudadanos “ellos han sido leales y nosotros también” y gracias a que “ha habido generosidad por las dos partes” ahora Andalucía tiene estabilidad política.

En relación con dicha apertura solemne volvió a oponer el “espectáculo” de Podemos y el supuesto trabajo callado del PSOE para cambiar leyes o evitar que el exministro Jorge Fernández Díaz presidiera la Comisión de Asuntos Exteriores, veto que justificó por que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no podía pretender “que los demás comulguen con ruedas de molino”, y sabía que proponiendo a ese candidato “estaba violentando al resto de fuerzas políticas”.

Por último, sobre la posibilidad de que Rajoy convocara de nuevo elecciones si la oposición le tumbara las iniciativas, Díaz objetó que “sería un chantaje y una amenaza” y “se le vería el plumero”, y cuando eso le ocurre a un dirigente político “lo paga en las urnas”.

(SERVIMEDIA)
18 Nov 2016
KRT/caa