Así lo señaló hoy la consejera de Empleo, Mujer e Inmigración, Paloma Adrados, durante su visita al Centro de Atención a Mujeres Víctimas de Agresiones Sexuales de la Comunidad de Madrid (Cimascam), uno de los recursos que integra la red y que este año recibirá 374.095 euros por parte del Gobierno regional para desarrollar su labor.

El Cimascam es un centro no residencial que presta atención especializada a mujeres víctimas de violencia sexual y a los miembros de su entorno familiar, independientemente de que hayan presentado o no una denuncia previa sobre su situación, "y persigue un doble objetivo: la recuperación integral de la persona y la reparación del daño que ha sufrido", explicó la consejera.

Así, la plantilla del centro, formada por trabajadoras sociales, psicólogas y letradas entre otros profesionales, ofrece a las mujeres asistencia social y psicológica para apoyarlas en su recuperación, además de orientación jurídica y asistencia letrada que se prolonga a lo largo de todo el proceso judicial. En las instalaciones, que cuentan con un servicio de ludoteca, también se desarrollan actividades informativas y de sensibilización.

El pasado año, el centro atendió a un total de 327 mujeres, la mayoría de ellas con edades comprendidas entre los 26 y los 40 años (41,89%), de nacionalidad española (67,27%) y que habían sufrido una agresión sexual (77,67%). Además, ocho de cada diez habían denunciado previamente su situación.