Según informó la Guardia Civil, la operación se inició el pasado mes de agosto, cuando agentes de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Almería detectaron a un grupo de personas que podría estar utilizando embarcaciones para introducir grandes cantidades de droga en Europa.

Desde el primer momento, la operación se centralizó desde el Centro Nacional de Coordinación Eurosur del Instituto Armado, que integra las capacidades necesarias de investigación de la Policía Judicial con las de inteligencia en el área de vigilancia fronteriza.

La Guardia di Finanza italiana puso en marcha un dispositivo de vigilancia aéreo-naval que detectó que la embarcación investigada estaba siendo cargada con una gran cantidad de droga.

A continuación, desde Eurosur se dispuso que el ‘Río Miño’, junto con una embarcación perteneciente al Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil de Almería, interceptara el pesquero sospechoso.

En el momento de abordar la embarcación, las malas condiciones del mar dificultaron el trabajo del equipo de asalto de la Guardia Civil. A pesar de ello, la operación llegó a buen término y se logró la incautación de la droga y la detención de los tripulantes de la embarcación.

La Operación ‘Indalo’ ha dado como resultado la interceptación de más de 1.500 inmigrantes irregulares, tanto por la Guardia Civil como por Salvamento Marítimo, la intervención de cerca de 18.000 kilos de hachís y de 320.000 cigarrillos, así como la detención de un total de 28 personas.

Esta operación se inició el pasado 26 de julio y finalizará el 31 de octubre. Se centra geográficamente en el mar de Alborán y la costa española entre las provincias de Cádiz y Murcia, donde la Guardia Civil realiza los cometidos de vigilancia fronteriza y la inspección fronteriza como Resguardo Fiscal del Estado.