El líder del PSOE pareció dejar abierta esa posibilidad durante su intervención en la Cámara Baja al señalar que si se actúa “con altura de miras”, los partidos encontrarán “esa solución, y no le quepa duda (a Rajoy) de que el PSOE será parte de la solución”. Posteriormente fuentes socialistas negaron que este fuera un ofrecimiento para liderar ese Ejecutivo alternativo.

A este respecto, Iglesias subrayó que quiere ser “prudente” y no entrar a valorar esa declaración, aunque reconoció que le parecería “sensato” y “saludable” que Sánchez “hiciera una declaración” para acabar con el “desconcierto” que parecen haber sembrado sus palabras.

El líder de Podemos recalcó que la “responsabilidad” del secretario general de los socialistas es “explorar un Gobierno de alternativa” y que, aunque él no tiene “ningún problema” en llamar a Sánchez, defendió que “la iniciativa le corresponde a quien estaría dispuesto a liderar ese Gobierno”.

Sobre la posibilidad de que la coalición entre PSOE y Podemos siga adelante con el apoyo o la abstención de Ciudadanos, Iglesias reconoció que es difícil porque las formaciones naranja y morada son “incompatibles en materia económica”. “Estaría dispuesto a que un acuerdo de PSOE y Podemos pidiera el apoyo a Ciudadanos, pero tengo mis dudas de que Ciudadanos apoyara eso”.

DIFÍCIL DE INTERPRETAR

En esa misma línea se mostró en declaraciones a los periodistas el secretario político de Podemos, Íñigo Errejón, que señaló que “cada vez es más difícil” interpretar a Sánchez, así que defendió que “lo mejor es que se expliquen ellos”, en referencia al PSOE, si quieren trabajar en esa alternativa.

“Ya le hemos dicho que no a Rajoy, ahora falta decir si elecciones o Gobierno alternativo”, explicó Errejón que, asimismo, admitió que esa alternativa con el PSOE “no colma” todas sus expectativas “de cambio político”, pero que sí supondría “avanzar una parte del camino” respecto a un Ejecutivo presidido por Rajoy.