Garzón. El magistrado acude andando y tranquilo a su declaración como imputado

- Ni partidarios ni detractores acompañan al juez a su llegada al Tribunal Supremo

MADRID
SERVIMEDIA

El magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón acudió hoy andandado y aparentemente tranquilo hasta el Tribunal Supremo, donde ha sido citado a declarar como imputado por presuntos delitos de cohecho y prevaricación en relación con los cursos que impartió en Nueva York y que fueron patrocinados por el Banco Santander con 302.000 dólares.

Sólo los medios de comunicación esperaban al magistado a las puertas del Alto Tribunal. Cerca de medio centenar de periodistas, cámaras y fotógrafos se congregaron para ver cómo Garzón llegaba sobre las 10.15, acompañado únicamente por sus escoltas y por su abogado, Enrique Molina, al tribunal donde le esperaba el instructor Manuel Marchena para tomarle declaración.

Ni partidarios ni detractores de Garzón, que se encuentra esta semana de guardia en la Audiencia Nacional, se dieron cita a las puertas del Alto Tribunal en esta mañana lluviosa para apoyar o criticar al magistrado. Tan sólo una señora, desde la distancia, le gritó “¡inocente, inocente!”.

Una escena muy diferente a la vivida en la anterior declaración del magistrado ante el Alto Tribunal, que tuvo lugar el pasado 9 de septiembre a cuenta de su investigación de los crímenes del franquismo y en la que un gran número de partidarios y detractores de Garzón se enfrentaron verbalmente y se cruzaron gritos como “¡fascistas!” o “iros a Cuba”.

El magistrado pidió paso a los periodistas y dio los buenos días a los policías que custodian el Tribunal Supremo. Una vez dentro, se dirigió junto a su abogado por una escalera lateral hasta el despacho del instructor Marchena.

TESTIGOS

Además de la declaración de Garzón, el instructor de la causa, Manuel Marchena, ha citado a declarar como testigos para el próximo 21 de abril a James D. Fernández, director del Centro Rey Juan Carlos de la Universidad de Nueva York -entidad en la que el magistrado impartió sus cursos-, y a la subdirectora, Laura Turégano. Ese día también deberá declarar como testigo María del Mar Bernabé, asistente de Garzón durante su estancia en Nueva York.

Esta investigación fue abierta el pasado 28 de enero a raíz de la querella interpuesta por los abogados Antonio Panea y José Luis Mazón, en la que se acusa a Garzón de haber cometido delitos de cohecho y prevaricación por no abstenerse en una causa contra el Banco Santander a pesar de haber recibido un patrocinio de esta entidad bancaria para los cursos que impartió en la Universidad de Nueva York.

Garzón recurrió esta decisión alegando haber sufrido indefensión, pero la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo desestimó sus argumentos.

(SERVIMEDIA)
15 Abr 2010
DCD/caa