En un análisis sobre las consecuencias de la reforma laboral recogido en el Informe Económico y Financiero de ESADE del primer semestre del año, que ha sido publicado este lunes, Nadal explica que el problema de la economía española es que los precios, costes y salarios han ido subiendo por encima de lo que lo hacían los competidores.

Ante un retroceso de la actividad y el empleo por la crisis y sin la posibilidad de depreciar la moneda, según este colaborador de Mariano Rajoy, la alternativa que cabía era “mejorar la competitividad por la vía de los precios”, lo que “se ha logrado sin pérdida de poder adquisitivo de las rentas salariales”, ya que los salarios se han incrementado un 1%, según Nadal.

PROBLEMAS DEL MERCADO LABORAL

En cuanto al mercado laboral, sostiene que su estructura “margina” a los trabajadores temporales y los parados o las empresas que quieren entrar en el mercado, pues quienes se encuentran ya en él “refuerzan su posición” con pluses de antigüedad, costes de despido más altos, entre otros.

A esta estructura se suma que el desempleo que se genera con cada recesión no se elimina totalmente durante las recuperaciones.

Nadal concluye que la reforma laboral de 2012 “actuó de forma sistemática para corregir esta situación” y que “la recuperación económica se está traduciendo plenamente en oportunidades de trabajo”.

Entre las medidas que la reforma recoge, defiende algunas como la supresión de la ultraactividad, que “premiaba estrategias de negociación dilatorias y congelaba las condiciones laborales”, o la clarificación de las causas de despido para basarlas en criterios económicos “más objetivos que la antigüedad”.

Por último, agrega que “las perspectivas de España indican que estamos en la vía correcta” y la reforma laboral “ha sido imprescindible para lograrlo”.