El cultivo permanecía conectado de manera ilegal a la red pública eléctrica. Una inspección técnica determinó que el consumo energético del inmueble no se correspondía con un uso doméstico y sí con uno industrial. La inspección arrojó como resultado una carga de acometida de 42,9 amperios, cuando lo habitual es que en una vivienda estándar oscile entre 2 y 3.

En el operativo han sido detenidos el principal investigado y su pareja sentimental, ambos moradores del chalé en el que se localizó la plantación. Igualmente han sido arrestados otros dos hombres que realizaban labores de mantenimiento y cuidado del cultivo

Además de las plantas de marihuana, durante la operación se han intervenido 500 gramos de cogollos de dicha sustancia, una balanza de precisión y una pistola eléctrica en perfecto estado de funcionamiento.