El PSOE se planta en el "no" a Rajoy sin mencionar la abstención

-El Comité Federal se cierra sin resolución escrita

MADRID
SERVIMEDIA

El Comité Federal del PSOE se aferró este sábado a la seguridad del no a la investidura de Mariano Rajoy, en el que tanto la Ejecutiva como los barones territoriales están de acuerdo, y optó por no adentrarse en las posibilidades que se abrirán después, aunque planea la sospecha de que hará falta convocar otra sesión para sopesarlas.

La reunión de hoy duró más de seis horas desde que el secretario general, Pedro Sánchez, concluyó su intervención inicial de análisis política, hasta que terminó su respuesta conjunta a los 48 asistentes que pidieron la palabra. Y, según diversas fuentes que asistieron al encuentro, no registró grandes diferencias entre lo que la dirección y los barones han venido manifestando en público y los testimonios que se vertieron en privado.

La razón de esta coincidencia es el punto de encuentro que supone para todos el rechazo a la investidura de Rajoy, cuando éste se presente a ella, y, en principio, con carácter definitivo durante lasa votaciones que se sucedan. El PSOE apela para ello a la coherencia, al compromiso con sus votantes y al papel de alternativa implícito a la primera fuerza de la oposición.

Tanto Sánchez como buena parte de los barones recuerdan que la gobernabilidad nunca se garantiza con el apoyo o la abstención de ese segundo partido, sino que el que ha ganado las elecciones busca los votos de otras formaciones que hacen de bisagra. Y rechazan la presión pública que, por primera vez, esta recayendo en la primera fuerza de la oposición para que se abstenga.

"Y DESPUÉS QUÉ"

Hasta aquí todos de acuerdo. La duda es qué ocurrirá si el PP no concita en torno a sí los apoyos necesarios para su investidura y se aproximan unas terceras elecciones, que los socialistas tampoco quieren.

Un tema que, según comentaba uno de los asistentes, sólo planteó, una vez más, el presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, reclamando su derecho a opinar así. Preguntó un tímido “y después qué”, sin llegar a sugerir la forma en que los socialistas tendrían que dejar gobernar al PP.

Según dicha fuente, nadie mentó “la bicha”, la palabra abstención, con la que el PSOE teme que se dejaría un flanco débil por el que Podemos le podría robar votos de izquierda y monopolizar la oposición.

“En su caso, que hubiera un acuerdo entre los partidos para abstenernos todos; no sólo nosotros, también Podemos”, reclama una integrante de la Ejecutiva, evidenciando el miedo a que la formación de Pablo Iglesias capitalice la cesión del PSOE al PP y, ahora sí, logre el ‘sorpasso’.

INVESTIDURA DE SÁNCHEZ

La otra salida si el PP no llega a acuerdos, la de que Sánchez vuelva a intentar su investidura, tampoco merece entre la dirección y los barones la unanimidad que sí despierta el no a Rajoy.

La plantearon, en privado igual que en público, la presidenta de Baleares, Francina Armengol; el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, el secretario general del PSOE de Castilla y León, Luis Tudanca, y el exdirigente de Izquierda Socialista y excandidato a las primarias de 2014 José Antonio Pérez Tapias. Y la apoyaron el exeurodiputado valenciano Andrés Perelló y el exconsejero vasco Iñaki Arriola. Otros miembros de la Ejecutiva la defienden en privado. Pero es minoritaria.

Esta opción la combatieron otros presidentes autonómicos como el aragonés Javier Lambán y el asturiano Javier Fernández, a quien uno de los asistentes aseguró haber oído espetar a la Ejecutiva “que se olvide de formar un gobierno alternativo”.

Con lo cual, si la vía Sánchez es minoritaria en el propio PSOE y nadie se plantea la “bicha” de la abstención, ¿qué opción ha de tomar el Partido Socialista si Rajoy no cumple las órdenes humorísticas de aprender catalán que le trasladaron, por ejemplo, el propio presidente asturiano y el alcalde de Vigo, Abel Caballero?

Pérez Tapias tiene la impresión de que planea la convocatoria de otro Comité Federal para decidir los pasos a seguir entonces. Por lo pronto, éste no ha aprobado ninguna resolución escrita, como sí hizo el posterior a las elecciones de diciembre.

Fuentes oficiales de la Ejecutiva aseguran que sigue vigente la apoyada entonces, que también decía no a la investidura de Rajoy y permitía a Sánchez intentar la investidura siempre que no pusiera en juego la integridad de España pactando con independentistas . La propia Armengol llamó la atención sobre el hecho de que el PSOE pida ahora al PP que negocie con independentistas y el PSOE se autoimpuso la línea roja de no hacerlo.

Con el debate socialista centrado en estos particulares, no muchos se atrevieron a criticar a Sánchez por los resultados electorales. La presidenta de la Junta, Susana Díaz, llamó a incidir en las causas que han llevado al descenso electoral del PSOE, Javier Fernández calificó de “alarmante” la distancia que ahora separa a los socialistas del PP, y Javier Lambán recordó que Rubalcaba dimitió con más escaños. Eduardo Madina también llamó la atención sobre el descenso del PSOE.

BLINDARSE DE PODEMOS

Caballero sugirió una solución: blindarse ideológicamente respecto a Podemos volviendo a abanderar los avances sociales, como siempre hizo ese partido. El alcalde de Vigo intuye que las clases medias, la “gauche divine”, ya están abandonando a la formación de Pablo Iglesias; ahora sólo falta recuperarlas para el PSOE.

Todos los barones comentaron que eran unos malos resultados, pero empleando los típicos “eufemismos” de la “liturgia” socialista, según ironizaba uno de los asistentes.

Probablemente porque, incide un miembro de la Ejecutiva y verbalizó la propia Armengol en el Comité, de los malos resultados tendrían que hacerse responsables todos los barones. Vara sí asumió la responsabilidad de los de Extremadura, según fuentes asistentes.

En su respuesta, informaron desde el PSOE, Sánchez afirmó que ve al PSOE en condiciones de ganar las elecciones, mencionó que Rajoy, este mismo sábado, no aclaró si se presentará a la investidura cuando se lo preguntaron, y enfatizó que, si no está ahora mismo gobernando, es porque fue fiel al proyecto del PSOE manteniéndolo autónomo frente a los planteamientos de ruptura territorial de Podemos.

Por último, dijo que se siente cómodo en la relación actual con el PSC, que es la "adecuada". El primer secretario de los socialistas catalanes, Miquel Iceta, defendió la Declaración de Granada y el debate que está teniendo lugar dentro del PSC, lo que sólo concitó cierto rechazo por parte del presidente asturiano.

(SERVIMEDIA)
09 Jul 2016
KRT/man